Después que el Presidente, Enrique Peña Nieto decidió dejar de jugar el papel de deidad sexenal en la política mexicana y reconocer que es un hombre de carne y hueso, al pedir a los mexicanos perdón por el escándalo de la casa blanca y reconocer que cometió un error, muchos se preguntan: ¿Y ahora qué sigue?
Es obvio que muchos de sus adversarios quisieran verlo en el cadalso, que corra la sangre y que mejor que viendo rodar su cabeza.
Yo debo de confesar que no sé qué sigue. Sin embargo si me gustaría plantear lo que me gustaría que siguiera después de esa mea culpa del Presidente, Enrique Peña Nieto.
Me gustaría que el Presidente llamara a los colaboradores que forman su Gabinete, los Dioses del Olimpo con los que comparte el poder, para que les pidiera a todos que hicieran un sano y honesto ejercicio de evaluación de las acciones que han hecho y después llamar uno a uno para que públicamente confesaran cuales han sido sus errores y
pidieran también con humildad perdón a los mexicanos por los daños que han causado.
Como me gustaría que Luis Videgaray, secretario de Hacienda, públicamente reconociera que se equivocó en el primero, segundo y tercer año cuando pronosticó crecimientos de la
economía nacional, que resultaron falsas ilusiones.
Como me gustaría que el Secretario de Hacienda y Agustín Carstens, director del Banco de México, juntos confesaran ante México que se equivocaron y cometieron un gran error cuando a mediados del 2014 el peso mexicano empezó a ser presionado por la inestabilidad y no actuaron a tiempo y reaccionaron hasta marzo del 2015, cuando el peso había pasado de 13.60 a 15.50 pesos.
Esos graves errores, por no actuar a tiempo, provocaron que ahora el dólar se venda en casi 19 pesos, dañando a empresas y a millones de mexicanos.
Como me gustaría ver sentados juntos al secretario de Hacienda, Luis Videgaray y al secretario de Economía, Idelfonso Guajardo, para que confesaran ante los mexicanos, especialmente de la zona fronteriza, que se equivocaron en las acciones que pusieron en marcha para regular las importaciones de autos usados.
Esos graves errores de dichos funcionarios han provocado graves daños a la economía de la zona fronteriza porque acabaron con el comercio de autos usados y con cientos de negocios familiares.
Esos graves errores del Secretario de Hacienda y el Secretario de Economía, han provocado que haya actualmente un escandaloso contrabando de autos usados, que cruzan por los puentes internacionales y en presencia de los responsables de las Aduanas, que se ha convertido en un rico negocio con pingues ganancias.
Como me gustaría que el secretario de Gobernación confesara que cometió un grave error al no evaluar las consecuencias sociales que se presentarían con la reforma educativa ante el rechazo de los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, que hoy tienen de rodillas al Gobierno de Enrique Peña Nieto y en graves problemas sociales y económicos a Oaxaca, Guerrero, Michoacán y Chiapas.
Que el mismo Secretario de Gobernación reconociera que se equivocó y que cometió un error en la estrategia para eliminar los bloqueos de carreteras hechos por maestros de la CNTE, al hacerlo con elementos de la Policía Federal Preventiva fuertemente armados en Oaxaca, donde no debe desconocerse que es tierra fértil de radicales, que aprovecharon la ocasión para prender la mecha que dejó varios muertos y que ahora se achacan al Gobierno.
Como me gustaría que el Director General de Aduanas, Ricardo Treviño Chapa, que por cierto hoy estará en Reynosa, reconociera que se equivocó y ha cometido errores con los Administradores de las Aduanas que ha nombrado y que en su desempeño se han convertido en los principales enemigos de las ciudades fronterizas.
Todos los sectores de la sociedad de Matamoros fueron víctimas de Dolores Velasco, Administradora de la Aduana hasta hace dos meses, al grado que llegó a proponerse que se le declara “Enemiga Pública de Matamoros”, gracias a la complacencia y la protección que le brindó el Administrador General de Aduanas.
En el pasado señor Director General de las Aduanas, los Administradores a pesar de venir de fuera eran verdaderos aliados del desarrollo económico y social. En la actualidad son sus verdugos, porque se sienten tocados por la mano de Dios.
Nos faltaría especio para seguir enumerando muchos de los yerros que creo que han cometido los integrantes del Gabinete del Presidente Enrique Peña Nieto, los Dioses de su Olimpo, que deberían seguir su ejemplo y también pedir perdón por los errores que han cometido en agravio de los mexicanos que también se sienten lastimados porque se les ha
dañado.
¿Cuántos más deben pedir perdón?
PICADILLO……GOLPE A LA DELINCUENCIA. De acuerdo con información del Grupo de Coordinación Tamaulipas, en lo que va del presente año las fuerzas federales han asegurado 697 armas largas, 171 armas cortas, 117 granadas, 3 cohetes, 16 lanzagranadas, 227 mil cartuchos de diferentes calibres y 5 mil 994 cargadores.




