5 diciembre, 2025

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Orgullo victorense de herencia italiana

Sus paredes de sillar y las baldosas de su piso fueron la primer residencia de arquitectura civil en la hoy capital tamaulipeca: los descendientes de la familia mediterránea pueden verla ahora convertida en la Pinacoteca de la ciudad

CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- La Casa Filizola era un lugar muy bonito donde coincidían todos los hijos de don Juan Filizola, Renato Filizola su nieto, lo recuerda con el patio lleno de mangos y parras…

«Soy el hijo de Renato, que a su vez era hijo de don Juan. La casa tenía muchos árboles de mango. muchas uvas, los árboles estaban enfrente y en la parte trasera había menos. Los carruajes eran vehículos de trabajo, no crean que eran cosas elegantes, eran carruajes pesados para transportar, llegaban de día y de noche para transportar mercancía. De lo que si estoy seguro es que la piedra azul que estaba en los marcos de las puertas fue traída de San Luis Potosí, porque en ese tiempo Jaumave y Tula eran zonas comerciales y por eso trajeron de allá ese material».

Al hacer un recuento en los años, para ubicar el edificio más antiguo en la ciudad utilizado como casa habitación, encontramos Casa Filizola, el edificio que comenzó su construcción en el año 1884 en la entonces Calle Real, que atravesaba la ciudad de oriente a poniente en doble sentido.

La fachada para su época era majestuosa, se distinguía por las paredes de piedra azul que fueron trasladadas desde la huasteca potosina, la residencia propiedad de la familia Filizola mantiene la entrada principal por la calle Hidalgo, la propiedad tenía una entrada en la calle Juárez por donde ingresaban las carretas para descargar la mercancía en los almacenes de la casona.

Es la primer residencia en Victoria de arquitectura civil, cuatro años antes también se había comenzado la construcción de la estación de ferrocarril que recibió la primer locomotora hasta el año 1890.

El edificio es también la primer propiedad edificada en Victoria por una familia italiana, antes de esto las familias españolas dominaban la economía local, pero Francisco, Blas y Nicolás Filizola, originarios de Torraca, provincia de Salterno al sur de Italia crearon en Victoria la primer fábrica de aguardiente de caña y anís, su nombre era «Acua Vitae».

La hacienda San Francisco estaba situada en Padilla y se recuerda que ellos compraban la cosecha completa a los agricultores de la zona.

Juan Filizola Brandi, contrae matrimonio con Juana Pier Cárdenas y la familia trasciende a nuestros días a traves de María, Laura, Francisco,Silvia, Atilio, Humberto, Arnoldo y Renato.

Hoy la Casa Filizola se ha convertido en la Pinacoteca de la ciudad, desde su inauguración en Octubre de 2015 ha cumplido su propósito, resguardar las joyas pictóricas de Tamaulipas en exposiciones temporales y sus muros se adornan con los muralistas más reconocidos de Tamaulipas y ahora con la obra de Diego Rivera.

Renato Filizola Haces, nieto de don Juan Filizola, el hombre que habitó y construyó la casa, ha vivido para ver la casa de los abuelos restaurada, expresó que su espacio de diversión es aún más bonita que en su memoria.

Las paredes de la Casa Filizola son de sillar, las baldosas del piso son piedras de 400 kilogramos, así se específico cuando los péritos restauradores de la obra llegaron a la construcción.

Se desconoce la procedencia del piso, pero se cree que pudo haber llegado con rodillos desde la sierra.

La situación de este inmueble en la actualidad, es que se ha convertido en la Pinacoteca de la ciudad, algunos integrantes de la familia aseguran que nunca perdieron la esperanza de ver el rescate de la casa del abuelo Juan.

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