¿Es una obligación moral?… ¿es un principio de ética?… ¿tal vez es un valor humano?
Puede definirlo de la manera que considere más apropiada, pero en los hechos se demuestra que en Tamaulipas, sin una ley que marque una obligatoriedad, son muy pocos, demasiado pocos, quienes en el servicio público se apegan a la transparencia de sus acciones o responsabilidades.
Me refiero a un caso específico, a la declaración “3de3”, mediante la cual funcionarios gubernamentales o legisladores deberían hacer del conocimiento general, además de su situación fiscal e intereses personales, el tamaño de sus fortunas, la fragilidad de sus finanzas o la honrosa medianía que decía Benito Juárez debía prevalece en esas áreas.
El saldo es hasta ahora, desolador. Sólo dos personajes, el alcalde electo de Nuevo Laredo, Enrique Rivas; y la virtual diputada local por el distrito 2, Brenda Georgina Cárdenas, han ofrecido esa prueba de claridad a la sociedad, como lo señala un trabajo periodístico de este diario. En contraparte, 540 –menos esos dos casos– se pasaron ese compromiso por el arco del triunfo, para decirlo de manera elegante. Es para llorar.
La verdad es que a los mexicanos los compromisos morales nos importan un grado menos que el calentamiento global. Históricamente, lo que la ley no manda y por lo tanto sanciona, es terreno de nadie. En lenguaje coloquial, no lo pelan. Nos viene guango, pues.
Así, si queremos conocer qué tan rica es nuestra alta burocracia, habrá entonces que esperar a que surja un ordenamiento que establezca esa obligatoriedad y por ende un castigo para quien lo incumpla; pero aún así, no es recomendable hacer cuentas alegres, porque si en algo somos duchos los mexicanos es en encontrar caminos para no respetar la ley.
Para qué le doy ejemplos…
Testimonio
Merecido es una palabra que no alcanza a dimensionar el tamaño del reconocimiento a su trabajo en Tamaulipas.
Mañana, el gobernador Egidio Torre encabezará a la sociedad civil para entregar un testimonio de gratitud del Estado al esfuerzo desplegado por la Secretaría de la Defensa Nacional en la lucha contra la inseguridad, que recibirá el general Salvador Cienfuegos, titular de la misma. E insisto, debe ser un homenaje que vaya más allá de un evento protocolario.
Tal vez haya voces críticas, tal vez se den opiniones encontradas sobre las labores militares, pero la realidad es que sin el apoyo de esa estructura, Tamaulipas ni siquiera podría mantenerse en pie. Muchas vidas y muchos patrimonios han sido salvados gracias a ese respaldo.
Como ciudadano y padre de familia, me uno a ese reconocimiento, con la palabra más sencilla pero a la vez más elocuente que tengo a la mano: ¡Gracias!…
Política similar
El comentario con que cierro este espacio no le quitará el sueño a nadie, pero no resisto la tentación de externarlo.
Parece que la política es igual en todas partes. En la lucha por la presidencia de Estados Unidos se confirma que vcomo la hemos sufrido en México.
Donald Trump anunció que podría invitar a una ex amante de Bill Clinton al debate con la esposa de éste, Hillary, su contendiente demócrata, en una muestra de que los sesos del republicano están en sus intestinos.
Le tengo noticias –no me refiero a Peña Nieto– al farsante del copete. Si lo hace Trump, convertirá en víctima a Hillary y le atraerá más simpatías y votos.
Algo similar pasó en la campaña de Tamaulipas, donde se intentó llenar de lodo al ahora gobernador electo y lo que consiguieron fue hacerlo más popular.
Los errores políticos se cometen también en inglés…