CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- El proceso legal que siguen dos miembros de Fuerza Tamaulipas acusados del asesinato del joven Cristian de Jesús Reyna Ortiz en el municipio de Tula en agosto pasado, se quedó en espera luego de una audiencia promovida por la defensa ante una segunda instancia para pedir suspender el proceso de los acusados.
En la diligencia, realizada en una de las salas de audiencias en el Poder Judicial de Tamaulipas, contó con la presencia de familiares de los policías, quienes a las afueras del recinto con pancartas pidieron la liberación de los policías inculpados en este caso.
A las doce cuarenta de la tarde, la sala de audiencias lucía llena de familiares de víctimas e imputados, de personal de la Procuraduría, abogados y curiosos del caso, quienes esperaban con paciencia que iniciara el proceso legal.
A la una en punto, la puerta que conduce al área de celdas se abrió, ahí dos hombres vestidos con uniforme gris, característico de los internos del Centro de Rehabilitación Social de Victoria salieron; Conrado y Jesús «N», que unos meses atrás su función era la de vigilar por la seguridad de los ciudadanos.
Una vez iniciada la audiencia, la cual es un procedimiento que se puede solicitar por las dos partes, para que un magistrado resuelva sobre la legalidad de una sentencia de un juez de control, la parte acusada en voz de los abogados, iniciaron con los alegatos sobre la audiencia.
En los alegatos, los abogados mencionaron que no hubo fallas por parte del Ministerio Público que terminaron en la presunta violación al derecho a la defensa de Conrado y Jesús «N», quienes están vinculados por los delitos de homicidio calificado y abuso de autoridad. Entre las quejas de la parte defensora, fue la negativa por parte de la fiscalía de solicitar un perito de informática para que fuera al hotel donde viven los elementos de la Fuerza Tamaulipas en Tula, para que extrajera los vídeos de las cámaras de seguridad, otra fue la negativa de entregar la carpeta de investigación.
Ante esto, durante el turno de alegatos por parte de la Fiscalía, ésta respondió que las acusaciones hechas por la parte defensora fueron realizadas sin fundamento, ya que en lo mencionado por la parte defensora no contaba con sustento legal.
Luego de esto, el magistrado Javier Valdez Perales, resolvió resolver dentro de tres días, los alegatos expuestos por la parte defensora y la fiscalía, por lo que luego de esta fecha se conocerá si los policías acusados continuarán bajo el proceso que se sigue por los presuntos delitos de homicidio calificado y abuso de autoridad.




