CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Con rechiflas, insultos y abucheos a Rafael Méndez Salas, líder aún de los maestros en Tamaulipas, transcurrió el primer día del congreso de delegados de la Sección 30 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), con la necesidad de elegir finalmente este viernes al sucesor.
Al cierre de la edición, no hubo un sólo nombre vencedor, y lo único en que coincidía el 70 por ciento de los 800 delegados era en rechazar las imposiciones de Méndez Salas.
En la ceremonia previa al Trigésimo Congreso, estuvieron como invitados los ex secretarios generales Enrique Meléndez Pérez, Jaime Medellín Cepeda, Jorge Guadalupe López Tijerina y Arnulfo Rodríguez Treviño, aunque este último llegó acreditado como delegado y con la consigna de reconstruir la unidad.
Pese a ello, gran parte del tiempo se consumió en inhabilitar a Imelda Infante, para lo cual se presentó un oficio firmado por todos en que solicitaban su intervención al Secretario del Comité Ejecutivo Nacional del SNTE, Juan Díaz de la Torre.
En el documento, los inconformes mostraban las pruebas de la imposición de Infante como incondicional del dirigente saliente, Rafael Méndez, quien le habría conseguido algunas horas dentro de la sección de Secundarias Técnicas y darle el pase a los trabajos del congreso.
“Estamos cansados de los abusos de autoridad de quien sin solvencia moral se presenta a formar parte del próximo comité seccional, faltándole al respeto a miles de maestros que le han servido al SNTE…”, se lee en una parte de este oficio.
Según el programa, los trabajos se reanudarán desde temprana hora para sacar a un secretario o a una secretaria, con un perfil conciliador que retome la lucha por los derechos de los docentes, responda a las inconformidades por la reforma laboral y conjure la amenaza de pulverización que se cierne sobre la Sección 30 con el posible surgimiento de otras representaciones sindicales.
Actualización:
Quedan Rigoberto Guevara y Abelardo Ibarra como finalistas en la sucesión del SNTE.
Se quedaron en el camino Cecilia Robles y Jaime Ramos.
Como candidato de unidad, el magisterio apoya a Rigoberto Guevara como el próximo dirigente del SNTE, mientras Rafa Méndez trataba de impulsar a Jaime Ramos.