+ Estado y federación quedaron a deber + Primeros 3 meses de Cabeza de Vaca
+ Cambio en el PRI hasta el 2017 + Magda y Azcárraga se pelean MORENA
Dentro de 2 semanas llegará a su fin el 2016 y lamentablemente para los tamaulipecos, como para los mexicanos en general, el balance general de los resultados de los programas del gobierno ha vuelto a ser negativo en todos los aspectos del quehacer social. Como ya se ha hecho costumbre, de nueva cuenta los gobernantes nos quedaron a deber.
El pasado 30 de septiembre concluyó el sexenio del gobernador Egidio Torre Cantú y para desgracia de casi todos, así como empezó terminó, en medio de la violencia, el hartazgo de la ciudadanía contra el saqueo, la corrupción, la impunidad y el deplorable desempeño de las autoridades.
El 4 de enero del 2011 el ahora ex gobernador dirigió un mensaje en el que se comprometió a iniciar la construcción del Tamaulipas que todos queremos, más seguro, en el que podamos transitar libremente por sus carreteras, con más empleo y cultura de la legalidad, que resultaron un catálogo de buenas intenciones y de la habitual retórica del poder.
A pesar de los más de 20 mil millones de pesos que dijo que gastó para combatir a la delincuencia, no solamente las carreteras sino también las calles de las ciudades y las comunidades del medio rural continúan siendo tan o más peligrosas e inseguras de lo que eran seis años atrás.
También ofreció que cerraría el paso a la impunidad con la creación de instituciones limpias, fuertes y capaces de generar paz y tranquilidad, así como dignas de la confianza de los tamaulipecos, compromisos que a la postre resultaron una sarta de mentiras y que, por ese motivo, los electores le cobraron masivamente la factura en las urnas el 5 de junio.
SÓLO PERIODICAZOS
En respuesta al sentir general de la sociedad estatal, el entrante gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca advirtió que no habría borrón y cuenta nueva, como se estilaba entre los gobiernos del PRI que se tapaban unos a otros, y que sin recurrir a ninguna cacería de brujas se castigaría conforme a la ley a los responsables de haber actuado al margen de la ley.
Hoy, a escasos 79 días de haber asumido las riendas políticas del Estado, el mandatario sólo ha exhibido ante la opinión pública las irregularidades del régimen que le precedió, entre ellas la enorme deuda pública de 17 mil millones de pesos y la hipoteca del 40 por ciento de la recaudación del impuesto sobre la nómina para pagar un préstamo de 6 mil millones contratado por el gobierno de Eugenio Hernández Flores, entre otros, que hasta a la fecha, sin embargo, no han pasado de periodicazos.
En el ámbito municipal, los préstamos por más de 2 millones de pesos otorgados a una docena de síndicos y regidores por la gestión del alcalde Gustavo Torres Salinas, que algunos han tipificado como delito de peculado en agravio de la hacienda pública, se encuentran en las mismas.
El presidente Enrique Peña Nieto llega a su cuarto año de gobierno y, como sucedió con el de Torre Cantú, el saldo ha resultado igualmente negativo.
En materia de seguridad, que sigue siendo una de las principales demandas de la ciudadanía, de acuerdo con el Sistema Nacional de Seguridad Pública la cifra de muertos en hechos ligado al crimen organizado, que en el sexenio de Felipe Calderón llegó a los 121 mil, ya es de 69 mil 588 fallecidos.
El número de secuestros superó los 5 mil y el de la extorsiones los 23 mil, sólo de los casos denunciados en el año que está por terminar.
Aunque oficialmente se crearon un millón de empleos y se ha recuperado el poder adquisitivo de las familias.
La realidad demuestra, no obstante, que el campo sigue descapitalizado, la pobreza es mayor a pesar de la Cruzada Nacional, el sistema de educación es de baja calidad y la corrupción y la impunidad están a la alza, no obstante el Sistema Anticorrupción, lo mismo que el precio del dólar estadounidense, los de los combustibles y las tarifas del servicio de energía eléctrica.
Lo único que está a la baja es el crecimiento de la economía. El Banco de México redujo esta semana las expectativas a 1.6 para el año que viene.
Y seguramente, como suele ocurrir, después de que haya concluido el sexenio en turno, ya sin el maquillaje gubernamental, los números rojos serán mayores.
PANORAMA ADVERSO
Pero en tanto que las familias se preparan para celebrar la navidad y el fin del año y hacen milagros para que el aguinaldo les alcance por lo menos para un pollo y una tamalada, la designación del nuevo dirigente estatal del PRI, que el jerarca nacional Enrique Ochoa Reza aseguró inicialmente que se resolvería a mediados de octubre, se da como un hecho que se decidirá hasta el 2017, quizá hasta después de que se haya finiquitado la selección de candidatos a gobernador de los Estados de México, Nayarit y Coahuila.
La situación luce tan incierta que la mayoría de los militantes piensan que, sea quien sea al final de cuentas el elegido, Alejandro Guevara Cobos, Manuel Muñoz Cano o algún elemento ajeno a los grupos antagónicos y de bajo perfil, para completar el periodo que Rafael González Benavides dejó a medias, poco o nada podrá hacer para rescatar al tricolor del abismo en que lo dejó la perdida de la gubernatura y de la mayoría de los asientos del congreso del Estado.
En ese escenario, al menos en los municipios del sur, no se vislumbra nada promisorio para el ex invencible.
En el de Madero, propios y extraños auguran que será una misión imposible impedir la reelección del alcalde Andrés Zorrilla Moreno y un panorama similar se vislumbras para la alcaldesa de Altamira, Alma Laura Amparan Cruz, a menos de que las familias De la Portilla, Carrillo, Martínez Manríquez y demás hicieran causa común con el ex partido de la Revolución.
MAGDA, SIN RIVAL
Sólo en el de Tampico las cosas lucen diferentes.
La Maestra María Magdalena Peraza Guerra sigue siendo la favorita para seguir al frente de la alcaldía por otros tres años al término de la actual gestión, aunque a ciencia cierta no se tiene aún idea si lo hará otra vez con las siglas de la alianza del Verde-PRI y Panal, o si, como se comenta en los círculos políticos, la titular del ayuntamiento se ve en la necesidad de recurrir a un nuevo partido político, a MORENA, por ejemplo, por el que se dice que también hace la lucha el ex alcalde Fernando Azcárraga López.
Es necesario señalar que si, como a algunos piensan, el partido de AMLO le llegara a hacer el feo al tampiqueño con ganas, no sorprendería a nadie que el priista disputara el gobierno porteño como candidato independiente o con la camiseta de cualquier otra organización, como el Movimiento Ciudadano, para impedir la reelección de la actual presidenta municipal y que, al mismo tiempo, favorecería al PRI o al PAN, el partido que cuente con la mejor opción.
El problema de Acción Nacional es que carece de una figura de peso para derrotar a la presidenta. El ex diputado Germán Pacheco Díaz y el Gerente General de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado, Manuel Adolfo Cabal Ruiz, que se dice que son los mejores prospectos, no parecen tener los arreos necesarios ni siquiera para pelear al tú por tú el cargo a la alcaldesa, que tiene todo para imponer el récord de gobernar el puerto en tres ocasiones.
Sea quien sea el candidato del Movimiento Regeneración Nacional a la alcaldía tampiqueña en el 2018, el efecto Andrés Manuel López Obrador le dará al aspirante en el municipio entre 28 y 30 mil votos, sufragios que el tabasqueño logró en las contiendas presidenciales del 2006 y el 2012 en las que disputó el gobierno del país, pero que podría crecer en la tercera.
FLACA LA CABALLADA
Con el Revolucionario Institucional en desgracia, muchos de los priistas desencantados seguramente emigrarán a las filas del partido del Peje o por lo menos lo beneficiarán con el voto.
Los politólogos coinciden por este motivo en que la pelea por el puesto del presidente Enrique aña Nieto será protagonizada otra vez por AMLO y por el PAN, sea este representado por Margarita Zavala, Ricardo Anaya Cortés, que tiene ya el apoyo de los gobernadores perredistas de Michoacán, Tabasco, Morelos y Quintana Roo, por un externo como el Secretario de Hacienda, Jose Antonio Meade Kuribreña o algún otro personaje de renombre más identificado con la sociedad civil.
Aparentemente, ninguno de los tres tendría, a decir de los expertos, el arrastre suficiente para superar al ex Jefe de Gobierno del ex Distrito Federal.
EL PRI se encuentra tan disminuido que prácticamente se ha quedado sin presidenciables. Tras la caída de Luis Videgaray Caso provocada por la visita de Trump a los Pinos, la de Manlio Fabio Beltrones Ribera, causada por la debacle electoral de hace medio año y el vapuleado Secretario de Educación que ni siquiera sabe ler, el pirruris Aurelio Nuño Mayer, el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, se ha convertido en el menos peor, al que tocaría jugar el papel de Francisco Labastida Ochoa o Roberto Madrazo Pintado al que se echaría mano para afianzar el tercer lugar de la competencia.
El Jefe de gobierno de la ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, saltaría a la palestra sólo para amarrar el registro del PRD en la capital del país.
En asuntos de otra índole, a la lista de los siete diputados del Estado de Hidalgo, 6 del PRI y 1 del Verde Ecologista, que tuvieron la vergüenza de renunciar al bono navideño de 150 mil pesos, se sumó a última hora, porque así lo exigía la mayoría de los mexicanos, fue la legisladora panista Eloisa Talavera Hernández. A los restantes 492 representantes populares del palacio de San Lázaro les valieron sombrilla las críticas, las protestas y expresiones desaprobatorias de los votantes.
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