CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Cada mañana 44 bebés amanecen tras las rejas en Tamaulipas, quienes son la compañía y la razón de vida de igual número de madres que se encuentran purgando una condena en los seis centros penitenciarios del estado.
Seis de ellos viven en el Centro Penitenciario de Ciudad Victoria, lugar que fue testigo de la fuga de 29 internos, y de un incendio del 22 al 24 de marzo pasado, lo que sin lugar a dudas representa un riesgo para los menores y para el derecho humano de las madres de estar con ellos.
De acuerdo con el artículo 10 de la Ley Nacional de Ejecución Penal, vigente a partir del mes del 16 de junio del 2016, las internas que se encuentren purgando una pena en un Centro Penitenciario, tienen el derecho de vivir con sus hijos desde su nacimiento hasta los tres años.
Otro derecho marcado por la Ley de Ejecución Penal, es el de brindar alimentación adecuada y saludable a los menores de edad, además de recibir educación inicial para los hijos de las internas y vestimenta acorde a su edad y etapa de desarrollo.
En los Cedes de Matamoros y Reynosa es donde se encuentra la mayor cantidad de menores de edad recluidos junto con sus madres, con 14 casos contabilizados por la Secretaría de Seguridad Pública, de estos cerca del 70 por ciento en cada centro son menores de 18 meses.
Mientras tanto, en Victoria son dos niños y dos niñas, quienes no rebasan el año y medio de edad, que todos los días, en todo momento están cerca de sus madres, seres que todavía no alcanzan a comprender que es la libertad, por que se pierde o por que sus madres están ahí.
Además de los menores, en los Centros Penitenciarios de Victoria son 288 mujeres las que se encuentran en espera de traer un hijo al mundo, madres que se encontrarán en las mismas condiciones de las 44 que hoy viven con sus hijos purgando una pena.
Los datos emitidos por la Secretaría de Seguridad Pública muestran que el robo, la extorsión, el secuestro, agresiones o delincuencia organizada, son los delitos por lo cual la mayor parte de las internas se encuentran en reclusión.
En el último informe emitido por la Comisión Nacional de Derechos Humanos, realizado a partir de encuestas a mujeres en 40 y visitas a los centros penitenciarios del país, entre ellos Tamaulipas, las condiciones no son las adecuadas para garantizar un trato digno.
Las carencias para todas las mujeres causa que se encuentren personas viviendo en el piso, falta de adecuadas instalaciones sanitarias e hidráulicas, deficiencia también en ventilación e iluminación natural o artificial, hechos que afectan tanto a quienes purgan una pena como a los menores que están ahí por su derecho humano a estar con su madre.
