Lástima que no todos seamos capaces de ver el verdadero rostro de Andrés Manuel López Obrador, porque en los últimos días nos ha enseñado la cara del autoritarismo, la intolerancia y la del capo de una mafia que quiere desbancar a otra organización delictiva.
Así es mis queridos boes, a Andrés Manuel hemos visto la desesperación lo revela, lo hace presa y le desenmascara.
Ayer le escuchábamos en un video hacer un llamado a los operadores de ‘la mafia del poder’ a ponerse en huelga el próximo domingo y no operar para que en el Edomex gane la señora Delfina Gómez y entonces el se convierta en ‘gobernador’ de facto.
Y sí, hay que reconocer que su ‘delfina’ está muy cerca de ganar la gubernatura, las encuestas revelan que al menos está empatada con Alfredo Del Mazo del PRI, REFORMA le da de hecho un punto arriba, Demotecnia 4 abajo, pero en promedio todas marcan un empate técnico.
Por eso AMLO está harto desesperado, porque sabe que con la operación del día de la elección su candidata puede perder y eso sería tal vez un revés más fuerte para su propia campaña del 2018 que para la propia aspirante a la gubernatura.
El Peje tendría que reconocer que si Delfina Gómez pierde el domingo sería su culpa, la del tabasqueño, porque fue él, quien con la denostación sistemática al PRD evitó que se diera una alianza que tendría hoy a MORENA y a su ‘delfina’ a la espera del trámite para hacerse con el triunfo.
Recordemos que AMLO primero llamó a la dirigencia nacional del PRD como parte de la ‘mafia del poder’, acusó a Juan Cepeda, candidato perredista de hacer el trabajo sucio al PRI, lo hizo una y otra y otra y muchas veces.
Pero hace dos semanas, cuando comenzó a ver que la casa para Gómez no era tan sencilla exigió a los perredistas se le unieran, pero ya, o que se atuvieran a las clases secuencias.
Por supuesto que lo mandaron a su rancho, si a ‘La Chingada’ y hoy el PRI pudiera retener para sus vitrinas la joya de la corona electoral del país.
AMLO es un tipo tan ilógico, tan locuaz, que no fue capaz de construir una alianza con el PRD, partido con el que le debió haber resultado natural convenir, pero si lo hizo con Elba Esther Gordillo y su gente del sindicato de maestros a los que se les ve sumados a la campaña morenista en pos de Delfina Gómez.
Pruebas: los videos en que Rafael Ochoa daba indicaciones a los maestros de que Elba Esther Gordillo ordenaba todo el apoyo a Delfina, más pruebas, las
apariciones del propio Ochoa en los eventos de ayer de la candidata del Peje.
Es decir que Elba Esther, una de las figuras más cuestionadas de la política mexicana, aquella que operó contra el PRI y a favor del PAN cuando ganó Felipe Calderón llamando entre otros a Eugenio Hernández para que traicionaran a su propio candidato, la que amasó miles de millones de pesos desviados del sindicato petrolero y nos heredó un sistema educativo corrupto, deficiente y viciado, es la aliada de AMLO.
Pero la desesperación del Peje se ha desbordado además por la desdibujada que ayer le dio la propia Eva Cadena, la diputada veracruzana a la que grabaron captando miles de pesos ilegales para AMLO.
El Peje había dicho que a su ex candidata a una alcaldía la habían chamaqueado, una y otra vez decía que era una buena persona y culpaba como siempre a la ‘mafia del poder’, pero resulta que Cadena ayer reveló que en realidad quienes la usaron fueron AMLO y los suyos.
Que el dinero que aparece en los videos era entregado por la propia gente de MORENA y dio santo y seña de cómo opera el desvío de recursos desde el Congreso de Veracruz hacia la causa de Andrés Manuel.
La respuesta de AMLO es la misma; la mafia del poder quiere descarrilar su proyecto de nación y las mismas cantaletas de siempre.
Insisto, está bien desesperado, unos días antes había arremetido contra la prensa que le cuestiona, le señala, le pregunta.
¿Hasta dónde va a llevar la rabieta de un tipo con perfil de dictador esta vez?, me temo que si Delfina no gana el domingo, la frustración de AMLO no parará sólo en las instancias electorales, este tipo podría incendiar el país y trasladar a los suyos a las calles y meternos en un lío peor que en el que ya estamos.
Y es que está aferrado a ganar por la buena o las malas el Edomex, un poco como el PRI, porque saben que en Coahuila y en Nayarit la cosa está muy perfilada para que el PAN gane.
Falta poco para saberlo, pero tenemos que estar preparados para que el país entre en una dinámica de violencia política que vaya más allá de las acusaciones y de los discursos a la confrontación física, AMLO tiene todo que ganar y nada que perder, tiene casi 20 años que no trabaja, no tiene bienes, ni tarjeta de crédito, ni dinero en el banco, vive de la caridad pública… o de la torpeza de nuestro sistema electoral.
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