MÉXICO. A través de un video compartido en distintas redes sociales, se ve a la pareja que intenta pagar la mercancía, pero al marcar el primero de los trajes la cajera les dice que cuesta 229 pesos, algo así como 12.70 dólares.
Es cuando la mujer se niega a pagar porque dicen que en el estante decía que costaban a “000” pesos.
“No señorita, eso no se hace, alguien puso los ceros, cualquiera le puede cambiar los ceros, ¿cómo no fue usted?”, cuestiona la empleada de Walmart, que insiste: “¿Qué tal si fue usted?”.
La pareja responde que aun si se trata de un error, deben respetar el precio que indican los letreros, por lo que la cajera pide ayuda a su supervisor y les solicita que dejen de grabarla, según reportaron medios locales como el diario Hoy.
Al final, aceptaron pagar los 229 pesos, pero insistieron en que la empresa no etiqueta correctamente la mercancía, aunque los usuarios de redes sociales acusaron a la pareja de “gandallas” y “oportunistas”.
“Por favor dejen de hacer esta nacada, no se ven inteligentes como ustedes creen. Al final del día van a regañar o hasta despedir al empleado que cometió el error (suponiendo que efectivamente es un error de empleado y no lo pusieron ellos mismos), solo porque ustedes quieren pasarse de listos. Son unos tontos si creen que algún directivo o dueño va a cubrir costos de estos errores, esto lo pagamos todos con cálculos de merma. Encima se ven como unos muertos de hambre peleándose con la pobre cajera que solo hace su (mal pagado) trabajo”, opinó un usuario en YouTube.
“El precio es el del código de barras. No lo que está en el anuncio. Cualquiera puede cambiar las prendas del lugar. Por eso traen código cada prenda. Qué idi… muertos de hambre, que a hue… quieren regalado todo”, agregó alguien más.
“No se trata de si tiene o no dinero, se trata de que las tiendas trasnacionales respeten el precio marcado o sugerido al público, de lo contrario el consumidor puede ir a Profeco a levantar una queja”, opinó por el contrario otro usuario.
Con información de Mundo Hispánico.
