30 abril, 2025

30 abril, 2025

Telesecundaria, proyecto para la equidad

Educación en tiempo de todos

Casi se cumple medio siglo del nacimiento de la Telesecundaria en México, de la que se han llevado a cabo no pocos estudios y que muchos conocimos como caso de éxito para contribuir a la cobertura y abatir la injusticia. Con el paso de los años, quedó olvidado. Otra vez, los más pobres en el olvido, puesto que a estas escuelas no asiste ningún hijo de “gente importante”.

La educación secundaria presenta una situación crítica en el país, más aún en el Estado, donde el 95% del logro de los adolescentes es considerado insatisfactorio o apenas indispensable. La Telesecundaria presente el menor logro.

Desde una mirada sistémica, en estos resultados influyen el contexto y las condiciones (insumos y procesos). Por tanto, asignar la responsabilidad directa a los docentes es reduccionista. Con un Plan de Estudios de 2011 y libros de 2006, con ínfimo o ningún recurso económico y material directos asignados a las escuelas, con rezago e insuficiencia tecnológica, ha funcionado la Telesecundaria en medio del olvido de todos. Tenemos 298 en Tamaulipas. Algunas con
excelentes condiciones, porque sus maestros y maestras, las han mantenido con aportes de los padres, recursos propios y gestión local.

Asisto en este momento a la Reunión Nacional para la Reformulación del Servicio Educativo de Telesecundaria en la Ciudad de México. Trabajando cercanamente con el Estado de Chiapas, nos damos cuenta de que estamos en la gloria. Vienen cambios importantes, cambios esperados, veremos cuánto recurso se asocia para impulsar estos cambios. Porque de lo que estamos seguros es de que sin recursos se pueden lograr muchas cuestiones; pero no reformas educativas y menos aún, la implementación de un Modelo Educativo. Resulta “que ahora lo importante es la actividad de aprendizaje que se genera”, ¿no será
que estamos ocultando la importancia de las condiciones que deben asegurarse?.

Me ha impactado el trabajo colaborativo que desarrollamos los dos estados, reflexionamos mucho sobre la situación actual de la Telesecundaria y el escenario deseable. Soñamos. Fuimos críticos y propositivos. Por ejemplo: “no debe cerrarse ninguna escuela telesecundaria si se está obteniendo alto logro educativo (niveles III y IV)”; aunque tenga escasos estudiantes, ello, porque estaríamos dejando a estos adolescentes al margen de la educación formal con docentes preparados, para que reciban el servicio del CONAFE; aunque reconocemos la loable labor que realizan. No justificamos el cierre de
escuelas si están aprendiendo.

En educación, la eficiencia tiene un sentido claro: lograr el aprendizaje de todos utilizando óptimamente los recursos asignados. Por ello, no comprendo cuando me comentan de que debemos ser eficientes y se refieren a tener hasta 44 estudiantes por salón. Eso no es eficiencia, es descuido e indolencia, que a veces es generada por la propia escuela solicitando incremento de alumnos en los grupos.

No sólo es una escuela eficiente la que tiene más alumnos por salón, se debe generar aprendizaje con los recursos asignados y el aprendizaje está asociado a una cantidad razonable de estudiantes por salón y docente. Incluso, puede llegar a no ser ni eficaz, porque deja de cumplir la razón para la que fue creada.

Vemos con mucho gusto las noticias de la SEP de que habrá nuevos libros de texto gratuitos para telesecundaria, nuevos materiales audiovisuales e informáticos. No se apostará todo al sistema Edusat, en el portal se compartirá todo en un repositorio para que los docentes puedan, con más libertad, crear sus situaciones de aprendizaje. El modelo pedagógico contempla que tanto los materiales audiovisuales e informáticos como los impresos (para docente y estudiante) conformen un sistema. El riesgo, otra vez, es que ahora toda la responsabilidad vuelva a caer en el docente, quien deberá procurar tenerlos almacenados electrónicamente para poder compartirlos y utilizarlos con sus estudiantes, en caso de no tener conectividad. Habrá que asegurar, desde la Federación, recursos para que el modelo pedagógico se implemente adecuadamente, de lo contrario, otra vez, volverán los docentes a tener responsabilidades asignadas, sin habérseles asegurado las condiciones. No queremos que la Telesecundaria siga olvidada.

Como Autoridad Educativa Local, debemos gestionar más recursos, es un hecho; sin embargo, estamos muy limitados en un Estado devastado en todo sentido, a pesar de todo, no estamos en el último lugar, podría ser el consuelo. Quiere decir que a pesar de todo, se mueve.

Asumiremos nuestro rol, gestionaremos para asegurar el derecho de los niños, niñas y adolescentes a recibir una educación de calidad: el máximo logro de los aprendizajes. Pero, ¿cuál es el máximo logro?
Por ahora, ahí lo dejamos.

*Subsecretario de Educación Básica
Secretaría de Educación de Tamaulipas
julio.pimienta@edutam.gob.mx

Facebook
Twitter
WhatsApp