MÉXICO. En julio y con sólo seis semanas, un buen samaritano encontró a este gatito deambulando, flaco y hambriento, cerca de un bote de basura en Dorchester, Boston.
El pequeño felino fue llevado rápidamente a un refugio, donde una semana más tarde el personal se sorprendió cuando la mitad de su cara se cayó.
En los meses siguientes, el gatito llamado “Nigel” por el personal del refugio ha esperado que se le practiquen una cirugía en su pequeña cara.
Y ese progreso ha sido monitoreado por 3 mil 610 personas en la cuenta de Instagram @nonosenigel.
En el refugio todavía no saben qué causó exactamente que la nariz del gatito se cayera, en un principio pensaron que padecía una infección de las vías respiratorias.
Su nariz y gran parte de su rostro parecían descoloridos, pero eso parecía ser una infección estándar para la cual lo tratamos con analgésicos y antibióticos”, explicó la gerente del centro de adopción, Alyssa Krieger, en una declaración en julio al Boston.com.
Nos quedamos impactados al descubrir más tarde cuán seriamente herido estaba ‘Nigel'”.
Mike Pavletic, jefe de cirugía del refugio, sospecha que algún tipo de traumatismo es la causa de lo que le pasó en la cara a “Nigel”, y no es un defecto congénito.
Señaló que vio una lesión similar en otro gato callejero.
Es probable que se le haya atrapado la nariz en algo así como una lata de atún”, dijo sobre ese gato.
A veces las personas dejan la tapa parcialmente unida, por lo que el desafortunado animal asoma la cabeza en busca de comida y luego quedan atrapados y cuando la sacan tienden a cortarse parte de la cara”.
Si bien es imposible decir qué causó exactamente el problema de “Nigel”, expresó que sea lo que sea tendría que ser un tipo importante de lesión.
También podría haber sido mordido en la cara, sufrir lesiones graves, infectarse, y luego una parte del labio y de la nariz se desvitalizaron”.
Conforme al refugio, “Nigel” parece apenas darse cuenta de su lesión y es un gatito como todos los demás: es acogedor y afectuoso cuando quiere serlo y le encanta pasar el rato sobre los hombros o acurrucarse.
Y, como es un gatito, adora el tiempo de juego: se le puede encontrar atacando ratones de juguete en cualquier momento del día o de la noche y jugaría durante horas con juguetes de cuerda si sus amigos humanos están ahí”, publicaron en los del refugio.
El minino no siente dolor, añadieron, pero la lesión le dificulta comer y tomar agua.
A “Nigel” le harán un par de cirugías más y después podrá ser adoptado.
Incluso, la semana pasada el refugio publicó que el minino salió muy bien del quirófano.
El refugio ya recibió más de 50 solicitudes de personas que esperan adoptar a la sensación de Instagram.
Con informacion de Excelsior.