MÉXICO. Ingenieros de la NASA realizaron una prueba de certificación de otro controlador de vuelo de motor RS-25 , en el puesto de prueba A-1 del Centro Espacial Stennis, cerca de la Bahía San Louis, Mississippi.
La prueba de 365 segundos de duración completa, efectuada la víspera, se produjo un mes después de que la agencia espacial culminara un año de evaluaciones del RS-25 con un ensayo de controlador de vuelo a mediados de diciembre.
De acuerdo con la Agencia Espacial estadunidense, este componente del motor de cohete es parte de una serie continua de análisis con piezas fabricadas utilizando técnicas avanzadas que harán que la construcción de futuros motores sea más asequible.
Para esta prueba, señaló, el controlador de vuelo se instaló en el motor de desarrollo E0528 del RS-25 y se encendió justo como un lanzamiento real.
#ICYMI, yesterday we fired up 1 of the 4 engines that'll power our @NASA_SLS rocket on future deep space missions. The 365-second test helped verify that the flight controller – the engine’s “brain” – can properly communicate with the rocket. Learn more: https://t.co/1Eb08rM57H pic.twitter.com/4zxpx2iAkX
— NASA (@NASA) January 17, 2018
Una vez certificado, ese controlador será retirado e instalado en un motor de vuelo para ser usado por el nuevo cohete de espacio profundo de la NASA, el Sistema de Lanzamiento Espacial, o SLS, que está construyendo la agencia espacial como el más poderoso del mundo, diseñado para transportar humanos en la nave espacial Orión y permitir misiones a la Luna y Marte.
El lanzamiento del cohete SLS será impulsado por cuatro motores RS-25 que se encenderán simultáneamente para generar dos millones de libras de empuje, y trabajar en conjunto con un par de propulsores sólidos, para producir más de ocho millones de libras de empuje.
Los modelos RS-25 para los vuelos iniciales del SLS son antiguos motores principales del transbordador espacial, modificados para proporcionar la potencia adicional que necesita el cohete SLS más grande.
Una parte clave de esa modificación es el nuevo controlador de vuelo, que funciona como el “cerebro” RS-25, que ayuda al motor a comunicarse con el cohete SLS y proporciona un control preciso del funcionamiento del motor y del diagnóstico de la salud interna.
La primera Misión de Exploración 1 (EM-1) del SLS, servirá como el primer vuelo de prueba para el nuevo cohete y transportará una nave espacial Orión sin tripulación.
Todos los motores para este vuelo han sido probados en Stennis y están listos para ser conectados al escenario central del cohete que se está construyendo en el Centro de Ensamblaje de Michoud de la NASA en Nueva Orleans.
Las pruebas de motor actuales son para los controladores de la Misión de Exploración 2, el primer vuelo que transportará astronautas a bordo de Orión.
Además de probar los motores de esos vuelos en Stennis, la NASA está preparando el puesto de pruebas B-2 en el centro para probar toda la etapa central del SLS con sus cuatro motores para el EM-1.
Esta prueba implicará la instalación de la etapa de núcleo de vuelo en el B-2 y el encendido simultáneo de los cuatro motores RS-25, al igual que durante un lanzamiento real.
Con información de Excelsior.