Mal acaba este gobierno en varios temas, pero uno de ellos fundamental es el de los derechos humanos. Esta semana el ombudsman Luis Raúl González Pérez presentó el informe de labores 2017 de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) ante el Presidente de la República, en la residencia de Los Pinos. La conclusión del informe es que en esta materia este gobierno queda a deber y que varios hechos lo marcarán para siempre.
Incluso, el ombudsman expresó una cosa que a mi juicio es muy grave: que con todo y las instrucciones del Presidente, las recomendaciones de la CNDH no se atendieron, lo cual indica que algo raro está pasando.
No son buenas noticias y ahora que ya inició la campaña electoral formal será un tema sobre el cual, sin duda, todos los candidatos tendrán que decir qué piensan hacer, más allá de las consignas y las frases elocuentes.
Desde el pasado mes de noviembre hemos tenido la oportunidad de ver la actuación de los diversos partidos y grupos políticos de manera previa a la supuesta formalidad electoral y hemos podido comprobar que tampoco en este tema el país tiene mucho de que regocijarse o, al menos, estar tranquilo. Lo que ha caracterizado a estos meses es la corrupción y el transfuguismo que existe en todos los llamados institutos políticos.
Desde hace varios años, la tónica de los partidos ha sido violar la ley electoral, que la autoridad los sancione e imponga multas, para impugnarlas en el tribunal y lograr que se cancelen o, por lo menos, se les rebajen y pagar a plazos. Y lo más importante, seguir haciendo lo mismo año tras año.
Con qué cara los candidatos pueden estar diciendo, y hasta junio seguro nos bombardearán con declaraciones y spots, que van a combatir la corrupción si no la persiguen dentro de sus propias organizaciones políticas.
Cómo justifican la cantidad de denuncias que hay en el Congreso sobre diversos funcionarios y solicitudes para eliminarles el fuero y poder procesarlos por delitos de corrupción y ninguna avanza por el acuerdo interno entre todos. Ya algunos han propuesto la eliminación del fuero, ¿podrá aprobarse algún día en este país?
¿Cómo justifican el PRI y Movimiento Ciudadano el haber filtrado el padrón electoral a empresas privadas? Es un hecho grave y se quedan tan tranquilos con una multa de más de 70 millones de pesos, que veremos en qué acaba. ¿Este hecho no ameritaría una sanción más grave, como impedirles participar en la contienda electoral? Porque además, como bien dice la columna Frentes Políticos, “las multas las pagan con dinero público que no debería derrocharse”.
Con qué cara la representante del Partido Revolucionario Institucional en el Instituto Nacional Electoral pide se le “rebaje” la multa que le impusieron por, también, haber filtrado el padrón electoral de Sinaloa a una compañía privada.
Cómo pueden justificar los que participaron como candidatos independientes no sólo las firmas indebidas sino también las triangulaciones y recursos no reportados, hechos por los que se les van a aplicar diversas multas.
Cómo puede la señora Margarita Zavala pretender aspirar a gobernar este país si de inicio su candidatura está marcada por la corrupción. Cómo puede uno entender lo que hizo la que fuera presidenta del Inai, un organismo autónomo que tenía un prestigio, salirse por la puerta de atrás para ser candidata del PRI y, además, según lo publicado, denunciada por corrupta.
Y así nos podríamos seguir con la nómina de candidatos a puestos de elección de todos los partidos donde hay personajes que además del transfuguismo han sido denunciados públicamente por hechos de corrupción y no les pasa ni pasará nada, porque algunos de ellos tendrán fuero.
Por supuesto que vivimos en un gran país, que tiene problemas y los puede solucionar, pero vemos que difícilmente se logrará con los políticos que nos pretenden gobernar en los próximos seis años, por lo cual el papel de la sociedad civil es muy importante para estar vigilando y señalando las cosas indebidas que ocurren.