El sábado pasado, la señora “Lupita” Becerra, madre del futbolista Adán Nuñez, dio a conocer en redes sociales, el repudio e impotencia que sintió por lo que Correcaminos le estaba haciendo a su hijo Adán. La madre de familia habría indicado, “Que desilusionada me encuentro de las personas que dirigen este equipo (Correcaminos)”.
Adán Núñez se dio cuenta por las mismas redes sociales, que sus compañeros del equipo de Segunda División, ya estaban entrenando, él, extrañado comenzó a investigar y, resulta que alguien, en el club y/o nuevo cuerpo técnico, creó un grupo de WhatsApp, donde no se incluyó al victorense.
La bomba, obviamente, detonó en Twitter, aficionados comenzaron a cuestionar la no convocatoria de Núñez y, el Club, se atrevió a indicar que “…Les informamos que todos los jugadores de nuestra Liga Premier, fueron citados para iniciar pretemporada y Adán, no se presentó…”.
Luego, el jugador respondió que “No sé cómo querían que me presentara, si a mí jamás me citaron, tuve que investigar y resulta que hicieron otro grupo, en donde sólo citaron a algunos y, yo no estaba. Qué fácil es, hacerme quedar mal, a mí…”.
Para empezar, una pena que un club profesional, tenga que resolver una situación de ese tipo en Twitter. Llama mucho la atención, que se le pague con esa moneda a un canterano que aportó mucho, las formas, no fueron las correctas.
Núñez se formó en Correcaminos desde los trece años, fue campeón con cuarta División, subió a tercera y fue parte del equipo que llegó a las semifinales, ante Cruz Azul.
En segunda, fue campeón varias veces y, por si faltaba algo, debutó en el primer equipo.
La decisión de ya no querer retenerlo, se respeta, el fútbol es de gustos, tal vez para quien tomó la decisión ya cumplió Adán su ciclo, pero es lamentable la forma en que se da su salida, no le dieron la cara como debe de ser, es malo hacerle esto a cualquier jugador, pero es peor, si se lo haces a un canterano que siempre se entregó por tus colores.
Hace seis años le hice una entrevista a Adán, me contó que siempre amó a Correcaminos y, desde que era niño, le gustaba apoyarlo en los partidos.
Me confesó que muchas veces, la situación económica era complicada y no le alcanzaba para pagar un boleto, pero eran tantas sus ganas de querer entrar a ver a su equipo, que varias veces se brincó la barda por el lado de las canchas de básquetbol, para poder estar cerca del “Corre”.
Adán sabe lo que representa Correcaminos y ha demostrado dentro y fuera de la cancha, que quiere al equipo de su ciudad. Correcaminos necesita más jóvenes así.
Seguramente Adán recibirá el apoyo de su familia, como siempre lo ha tenido y pronto encontrará otro equipo, donde pueda continuar su carrera y seguir con su sueño de un día, jugar en Primera División.
Actualmente, hay otro caso con un jugador que sólo participó en un torneo de menores con Correcaminos, pero él no se formó en la institución, aún así, el equipo le estaría poniendo trabas para firmar con Toluca, plantel que quiere sus servicios, ya tocaremos ese tema.
Vienen cosas buenas
En días pasados, Carlos Fernández, Director del Instituto del Deporte de Tamaulipas, realizó una ponencia donde acertó a en dar un balance de lo que ocurrió en la Olimpiada Nacional y lo que se avecina, para el deporte del estado.
Entre otras cosas, reveló que vienen situaciones que, sin duda considero positivas, como por ejemplo, que se mejorarán las instalaciones de Tiro Deportivo en la Unidad Deportiva Siglo XXI y dijo que habrá también nuevos espacios de boxeo, en la Adolfo Ruiz Cortines.
Por otro lado, compartió que trabajarán para volver lo antes posible al “Top Ten” de la Olimpiada y, sobre todo, apuntó que uno de los objetivos a lograr, es que Tamaulipas sea generador de seleccionados nacionales.
@daniriosmtz




