CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Con una amplia trayectoria en el fútbol profesional con los equipos de Rayados, Cobras de Ciudad Juárez y Correcaminos, el victorense Carlos César Zamora Urbina, no pierde el amor a una posición, en la cual durante su trayectoria lo dió todo, el ser portero.
Por más de 20 años, “Charly” Zamora militó en el balompié mexicano, incluso llegó a estar en Primera División con “La Pandilla”, recuerdos que quedarán grabados en él, pero no así el aprendizaje que tuvo, pues ahora lo resguardan decenas de niños y jóvenes, atentos a todos los consejos, indicaciones y entrenamientos que reciban.
Zamora Urbina, tiene muchas experiencias que contar en su escuelita de porteros, a sus 37 años de edad, ya no es profesional, pero ahora le toca estar en lado de los que buscan un sueño, la nueva generación de porteros, que quieren ser tal vez como él o mejor, pero con la convicción de aprender los aspectos básicos de esa posición y sobre todo los valores que se necesitan para llegar a ser profesional.
Más de dos años tiene desde que se fundó la Escuela de Porteros de Carlos Zamora, justamente poco después de su retiro, pero ahora no solo funge como entrenador en su institución, sino también en el Club de Fútbol Correcaminos.
SU INICIO
Carlos Zamora, nació el 2 de enero de 1981 en Ciudad Victoria, Tamaulipas, desde que nació, su padre como era apasionado del fútbol y en los primeros años de su hijo, surgió
llevarlo a un juego de fútbol, y “Charly” no tardó en encontrar el amor por este deporte.
“Desde muy chiquito me inculcó el deporte mi papá, él fue el que me enseñó el deporte del fútbol, recuerdo que un vez me llevó a ver un partido y de ahí empecé a encontrar el gusto por el fútbol”, inició la entrevista con Oé! Deportes.
Exclusivamente, no fue solo el fútbol el que le dió el visto bueno, sino también el gusto por el ser portero, ante la buena actuación de un guardameta que en ese momento veía.
“En ese partido el que se llevó todo fue el portero, y de ahí nació el querer ser portero, el portero hizo muy buenas atajadas, se lució y de ahí nació el amor en esa posición “, expresó el ex jugador de Correcaminos.
Como todo un niño, convencido en que quería ser portero, no tardó en decirle a su padre para que pudiera llevarlo a una escuelita de fútbol, para empezar a formar una trayectoria de futbolista, que en ese momento ni siquiera sabía.
“Inicié en la Copa UAT desde la categoría Biberones hasta la Juvenil. Llegué a estar en la Selección de Tamaulipas y posteriormente fuimos a Nacionales, donde hice buenas actuaciones y llamé la atención de visores”, mencionó.
Aunque fueron varios equipos los que le dieron la oportunidad de formar parte, por primera vez de un equipo a nivel profesional, fue Rayados su mejor opción, y no dudó en ser parte del equipo regiomontano.
“Me llamaron para ir a visorias de Atlas y Necaxa, pero después llegué a las instalaciones de Rayados y fui visoreado por un entrenador de portero que se llama Trinidad Caballero para ser parte de las Fuerzas Básicas. En Rayados estuve desde Tercera hasta Segunda, Primera División A y Primera División, la verdad fue una experiencia muy bonita
la que viví ahí.”, comentó.
Después de estar por un largo proceso en escuelitas de fútbol, por fin pudo lograr su sueño, algo que a su vez también se le complicó puesto que su familia era algo que tuvo que dejar por un tiempo para encaminarse a buenas cosas.
“Es muy complicado, yo me fui a los 15 años de edad, todo eso es algo difícil, pero realmente muy especial porque valió la pena, pero la verdad estar lejos de tu familia, estar acostumbrado a ciertas cosas y llegar a otro entorno es difícil”, dijo.
Su estancia en Correcaminos
Después de un breve paso por Cobras de Ciudad de Juárez, nuevamente regresar a Rayados, tuvo otra vez que mudar de equipo, y en el Apertura 2008 llegó al conjunto de Correcaminos de Ciudad Victoria.
El equipo de la UAT, fue donde mejor le gustó estar, puesto que siempre ha sido difícil vestir la camiseta del equipo, por las situaciones en las que ha estado, pero aunado a eso, por estar cerca de su familia y en su ciudad donde nació.
“Estuve en Cobras de Ciudad Juárez y también me abrieron las puertas en Correcaminos, en este último equipo fue una experiencia muy buena. La afición te presiona mucho, para nosotros los jugadores nos sirve demasiado, para que lo demos todos y saquemos el carácter”, indicó.
Es difícil ser portero
Carlos Zamora, aseguró, que ser portero requiere de muchos sacrificios, así como la de ser un futbolista profesional, algo que a le costó mucho, pero al final si logró cumplir el objetivo.
“La competencia que hay en el futbol es difícil, y más en una posición donde hay solamente uno el que está jugando, los trabajos de portero son más complicados de un jugador normal, pero está en uno si quiere trascender o quedarse ahí, está en la mentalidad y las ganas que le ponga cada persona”.
Lo bueno y malo
En la vida de los futbolistas, no todo es bueno, puesto que siempre hay problemas tanto malo como buenos, tal es el caso de “Charly” Zamora, quien afirmó en sus experiencias positivas haber pisado terreno en Primera División.
“Una de las experiencias, fue conocer a muchos jugadores, jugar en Primera División, el ir avanzando de Fuerzas Básicas hasta Primera División, fue una experiencia que no olvido”.
Por su parte, también comentó que una de las experiencias negativas, fue terminar su carrera como jugador profesional. “Lo que más me dolió fue el retiro, a todos los jugadores les duele eso y en mi ocasión, la tomé como una responsabilidad y decidí hacer eso”.
Su retiro
Todo jugador, no quiere llegar retirarse, pero al final se tiene que aceptar que todo acaba, es un ciclo, mismo que cumplió Carlos Zamora, quien contó que la causa de su retiro
fue ya no encontrar equipo y tener nuevos proyectos.
“Quería regresar a Rayados, al estar en Monterrey me dicen que ya estaban cubiertas la portería, entonces regresó a Correcaminos y es igual. Se me complicó mucho buscar en otros equipos, pero surgió aquí algo que era poner una escuelita y ser entrenador de portero, hoy en día estoy ahí en Correcaminos y tengo mi escuelita”.
Nuevos proyectos
A pesar de su retiro, Carlos Zamora abrió su camino a nuevas metas, una de ellas es abrir una escuela de porteros, donde ahora le ha tomado cariño, enseñar todo lo que algún día aprendió.
“Que los niños empiecen a aprender a edades muy corta esta posición, es una posición muy bonita y privilegiada, yo trato de enseñarles todos los aspectos básicos en la portería, como achicar, como salir, y es algo que me ha gustado mucho”, dice.
Zamora Urbina, trata de que los niños y jóvenes que formen parte su academia, aprendan al máximo, puesto que asegura que a su edad, no tuvo un entrenador enfocado a la posición de portero.
“Es realmente algo bonito, me pongo de este lado, me encariña mucho enseñarles, yo a esa edad no tuve un entrenador de portero, yo lo tuve hasta los 15 años que me fui a Rayados, y verlos ahorita en esta posición es muy bonito”, dijo.
Finalmente hizo una invitación para los interesados en formar parte de la Escuela de Porteros Carlos Zamora, para niños y jóvenes.
“Invitar a todos los porteros, entrenamos en al campo de la Gasolinera Arce, estamos de 16:30 a 17:30 horas y pueden llamarme al teléfono 8342513035. Es una bonita experiencia y les servirá de mucho, aquí hay muchos niños que solo vienen a entrenar y compiten en otros equipos en diferentes torneos”, añadió.