Entre más se habla de la descentralización de las secretarias y desaparición de las delegaciones se crean cada vez más confusiones.
Dicen que están en periodo de ajustes y opiniones diversas, pero muchas no son buenas, hablan de que serán muy costosas e imprácticas, tanto para el personal como para la
reubicación de familias y oficinas.
Algunos exponen como ejemplo el caso de los militares que son enviados de una ciudad a otra y no se quejan. La realidad es otra, los militares si se quejan, si les duelen tantos movimientos, por eso existen muchas deserciones y sus familias son las que más sufren.
Pero, con el agregado es que los hombres y mujeres que seleccionan la carrera militar son voluntarios y saben de antemano el sacrificio que deberán de hacer para servir al país.
En el caso de las secretarias hablamos de profesionistas, es muy fácil criticar y decir que bueno que los despidan, que ya era momento de adelgazar el aparato burocrático y que existe mucha corrupción.
Es inválido de que se mida a todos con la misma vara, en el servicio público hay buenos y malos empleados. Ni todo es blanco, ni todo es tan negro.
Veamos los planes de austeridad que propone la nueva administración establecen un recorte de 200 mil trabajadores de confianza federales de acuerdo a los análisis de los
expertos.
El proyecto es despedir al 70 por ciento del personal de confianza que son esos 200 mil servidores públicos. Los trabajadores de confianza son los titulares de dependencias, subsecretarios, oficiales mayores, directores generales, directores de área, subdirectores, jefes de departamento.
Los salarios son muy disparejos, pues hay los salarios de los Secretarios de Estado que superan los 200 mil pesos mensuales, hasta trabajadores que alcanzan los 9 mil pesos mensuales.
De las plazas de confianza, sólo el 9 por ciento de sus ocupantes pertenece al Servicio Profesional de Carrera, los cuales serán más complicados de remover de sus posiciones, en contraparte del personal que labora en las áreas de comunicación social, pues estas áreas tienden a desaparecer para concentrarse en la Oficina Presidencial.
Conservarán su empleo 976 mil 198 servidores públicos con planta o de base.
De las 200 mil personas que serán despedidas solamente van a engrosar las filas de los desempleados en una época donde la situación del país se encuentra en sus peores momentos, por eso crece el rencor social.
La propuesta del despido francamente es inmoral y para muchos expertos es inviable económicamente hablando. Quizá los resultados están muy lejos de alcanzarse, pero hay que dar tiempo al tiempo.
El coordinador de delegaciones en Tamaulipas, JOSÉ RAMÓN GÓMEZ LEAL dijo que el objetivo de la propuesta del presidente electo ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR es ahorrar dinero bajando el pago de rentas, adelgazando nóminas y desapareciendo el modelo de las delegaciones federales.
JOSÉ RAMÓN GÓMEZ LEAL perdió la alcaldía en Reynosa, frente a la panista MAKI ORTIZ, por lo que tiene impugnada la elección y en el remoto caso de que ganará en los tribunales, seguramente tendría que dejar ese cargo.
Dijo que la propuesta de desaparecer las delegaciones federales es reducir el aparato burocrático y disponer más recursos para inversiones públicas.
JR será el nuevo habitante de ciudad Victoria, ya busca casa y adelanta que fusionarán algunas delegaciones y dejarán de rentar muchas oficinas.
Los planes son ambiciosos, pero hay muchas razones para seguir dudando.
Bueno, por hoy es todo.
Adiós y aguas con los patinazos…
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