MÉXICO. En Holanda, un nuevo proyecto iniciado por la alcaldía de Eindhoven facilitará crear un complejo inmobiliario compuesto por cinco casas construidas con la ayuda de impresoras 3D, una de las primeras innovaciones de este tipo en el mundo.
“Es sólo el comienzo. Se trata de una tecnología revolucionaria, de una nueva manera de construir que se desarollará con el tiempo”, dijo Rudy van Gurp, uno de los encargados del proyecto “Milestone”.
Casas feitas com impressoras 3D estarão à venda para famílias na Holanda pic.twitter.com/hpS6SPD6uG
— DW Brasil (@dw_brasil) July 30, 2018
El proyecto se dio gracias a una asociación entre la municipalidad, la Universidad de Eindhoven y varias empresas constructoras.
Aunque esta técnica ya existe en el mundo, las casas diseñadas con impresoras 3D no son por lo general destinadas para residencia. Se trata de una primicia en Holanda, pues las casas de este nuevo complejo inmobiliario serán alquiladas. Un centenar de inquilinos ya expresaron su interés.
La renta mensual oscilará entre 900 y mil 200 euros (entre 20 y 26 mil pesos), lo que corresponde a los precios promedios de alquileres en Holanda para las superficies que tendrán. El complejo estará compuesto por cinco casas de tamaños diferentes y la primera, con tres habitaciones, estaría lista alrededor de junio de 2019.
Cada habitación requiere entre seis meses y un año de trabajos. El proyecto en su totalidad será terminado antes de cinco años. Una de las ventajas principales de utilizar la impresión en 3D es que posibilita imaginar un estilo muy libre.
“Todo es posible, podemos perfectamente adaptar el diseño al entorno”, afirma Rudy van Gurp a la AFP. Pero la iniciativa también está motivada por el problema de la escasez creciente de artesanos en Holanda.
“De aquí a unos años ya no tendremos tantos artesanos como albañiles, por ejemplo. Al introducir la robotización en la industria de la construcción, estaremos en condiciones de hacer casas más abordables en el futuro”, considera Rudy van Gurp.
Aunque esta técnica es más cara por ahora que los métodos tradicionales, los precios bajarán a medida que avance la tecnología de las impresoras 3D, subrayó. En Francia, una innovación similar fue lograda hace unos días. Una casa diseñada en 3D por la Universidad de Nantes ya es utilizada como vivienda social.
La familia que habita en la misma ha sido la primera en instalarse en una casa de este tipo.
CON INFORMACION DE MEDIOS.