MÉXICO.- El abuso psicológico y físico al que fue sometido Dean le provocó un colapso y serias complicaciones financieras.
«Era bastante controladora, solía sacar dinero de mi cuenta cuando recibía mi sueldo», asegura.
El hombre que prefirió usar un seudónimo para mantener el anonimato, denunció su caso en un programa radial de la BBC.
Ahora vive en una casa que acoge a hombres maltratados y su testimonio rompe el estridente silencio en el que viven los varones víctimas de abusos por parte de sus parejas.
«Me tiraba cosas a la cabeza, platos. De hecho, tengo hasta una marca que muestra lo que me hizo», detalló el hombre que lleva más de 10 años alejado de su familia por voluntad de su expareja.
Dean llegó al refugio, gestionado por el Servicio de Abuso Doméstico de Northamptonshire (NDAS, por sus siglas en inglés), tras sufrir un colapso en el trabajo.
Asegura que su pareja no le dejaba comer y llegó a sufrir una deshidratación aguda.
«No saben si fue un ataque por deshidratación, pero lo cierto es que no estaba comiendo. No me dejaban comer en casa», dice.
Al igual que muchas víctimas de abuso intrafamiliar, Dean vivió en silencio su problema.
Gracias a la intervención del Servicio de Abuso Doméstico de Northamptonshire (NDAS, por sus siglas en inglés), Dean pudo recibir atención en uno de los nueve refugios disponibles en Reino Unido para hombres maltratados.
Matthew Cunningham trabaja en la casa de acogida en la que vive Dean y dice que esta percepción es muy común entre las víctimas masculinas de abuso doméstico.
«No hay mucha información», explica. «Los hombres a veces no reconocen que son víctimas y no son capaces de verlo. Nunca han conocido qué opciones de ayuda hay a su disposición».
En México hasta un 40 % de la población masculina ha padecido algún tipo de maltrato de parte de una mujer, según cifras de la ONG «Colectivo hombres sin violencia».
Por vergüenza o desconocimiento, solo el 4 % de las víctimas ha denunciado ante las autoridades agresiones que se contabilizan desde golpes con las manos, rasguños y tirones de cabello, hasta atentados con objetos contundentes.
Con información de info7