CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- El monto para el Fondo de Aportaciones a la Seguridad Pública en los estados (FASP) que destina el presupuesto de egresos de la federación (PEF) 2019, muestra en que en 2019 el apoyo federal para enfrentar a la delincuencia en Tamaulipas, seguiría disminuyendo.
El FASP ha disminuido desde 2016 y hasta 2018 acumuló una caída superior en términos de poder adquisitivo, un 30 por ciento, en términos reales, si se compara lo recibido en 2015 con lo aplicado durante 2018, en términos reales o descontando la tasa de inflación acumulada en el periodo.
Aunque las partidas para cada entidad dentro del FASP y los acuerdos relativos aún no se dan a conocer, el presupuesto de salida para 2019 prevé una partida de siete mil 210 millones de pesos, lo que representa en cifras nominales, apenas 2 mil millones de pesos más que el FASP en el presupuesto de salida del año anterior.
En Términos reales el FASP 2019 tendrá una nueva caída del 1.6 por ciento, con lo que el apoyo para contratar, entrenar, armar y mantener activa a una mejor policía, continúa descendiendo en lugar de aumentar.
A partir de 2016 y debido al planteamiento para reducir el déficit presupuestal federal, se han entregado a Tamaulipas cantidades cada vez menores en los dos principales fondos para seguridad pública, mientras que otros como el Fondo para la Prevención del Delito y los subsidios para la Policía Acreditable, desaparecieron.
En pesos constantes o a valores del poder adquisitivo, se puede asegurar que a Tamaulipas la Federación le entregará este año para gasto en Seguridad Pública, el 68 por ciento de lo que recibía en 2015 y, esto significa en metálico unos 130 millones de pesos menos.
Mientras en 2015 la suma de Fondos y subsidios federales, cuatro en total, fue cercana a los 600 millones de pesos, para 2019 apenas habrá una aportación federal de 433 millones, lo que en cifras absolutas significan 167 millones de pesos menos y en pesos constantes o de poder adquisitivo serían poco más de 200 millones de pesos menos.
Mientras el fondo principal que se otorga a las entidades federativas para gasto en Seguridad Pública ha caído en términos reales, e incluso es mayor la caída en entidades con altos niveles de delitos de alto impacto como Tamaulipas, el presupuesto para la Cámara de Diputados y el Senado creció 3.6 por ciento en términos reales.
El gasto en Seguridad Pública que han hecho gobiernos como Tamaulipas con fondos fiscales propios, promedia mil 800 millones de pesos por año, por lo que desde 2012 se ha tenido que generar deuda pública para poder cumplir sólo los requerimientos más inmediatos.