* El columnista es autor de las novelas “Erase un periodista” y “Rinconada, la historia prohibida del maestro Ricardo” y Premio Nacional de Periodismo 2016.
En medio de la tragedia que afecta a México por las víctimas de la explosión del ducto en el estado de Hidalgo, los grupos conservadores muestran su verdadero rostro.
Siempre de espaldas a la nación y aprovechado hechos como el conocido, no dudan en confrontar a la sociedad repartiendo culpas hacia el régimen encabezado por AMLO, justo cuando empieza a destapar la cloaca de la corrupción.
Y por coincidencia en PEMEX que ya sabemos, durante muchos años estuvo convertido en la caja fuerte de políticos y ciertos empresarios. Y son los liderazgos de estos últimos que utilizan medios de comunicación apropiados para tomar revancha del voto mayoritario que les fue adverso en julio anterior.
No terminan de aceptar que el país y sus instituciones deben transformarse.
Pero no solo son los empresarios también políticos de administraciones pasadas como el ex presidente Fox, quien en su trasnochado lenguaje de hacendado ofendido, dispara calificativos contra AMLO impropios de alguien que estuvo al frente de la república, cuando su deber es apoyar a la nación al margen de diferencias políticas e ideológicas.
Aunque no olvidéis que Fox sigue siendo empleado de los EU, ahora como promotor en Latinoamérica de importante empresa dedicada a fomentar el consumo de mariguana.
Su intolerancia nada tiene que ver con la época en que hubimos de soportar con respeto sus tarugadas y ocurrencias oficiales.
En cuanto a quienes golpean bajo la bandera del PRI, olvidan que cuando Trump amenazó con intervenir de diversas formas a México, AMLO fue de los primeros que se formaron al lado de Peña Nieto en defensa de la soberanía nacional.
Lo cierto es que en la tragedia algunos malos mexicanos siguen apostando al desastre sin importar el dolor de las víctimas y mucho menos a detenerse sobre los orígenes de los lamentables hechos, que no son otros que la pobreza, marginación y olvido de los pueblos vulnerables.
Desde luego que estos malos mexicanos pretenden poner a prueba al presidente pero éste ya les dijo: “no lo van a lograr porque estamos decididos a seguir avanzando en el combate a la corrupción sin importar los obstáculos”.
Esta es una guerra con varios frentes en la cual para fortuna de la república, el respaldo hacia el régimen encabezado por AMLO se fortalece a pesar de los “golpes bajos”.
SOLIDARIDAD INTERNACIONAL
Es alentador por otra parte, que casi cien países de diversas tendencias, ofrezcan el apoyo necesario, según lo señaló AMLO en la conferencia de este domingo por la mañana.
Ahora sabemos que la ONU en conjunto, también es partícipe solidaria.
Este respaldo es significativo referente de la aprobación internacional hacia la política gubernamental.
Sin embargo aquí en el país, la falta de solidaridad privada se muestra en todos los sentidos. En otros países, incluso en los capitalistas, ante un hecho de las dimensiones del que nos ocupa, los grupos empresariales suspenden eventos de diversión por más importantes que parezcan.
Lo anterior no sucede en México donde el negocio privado es prioritario al luto nacional. Por ejemplo en el fútbol profesional, con escenarios convertidos como sabéis, en antros gigantescos de venta de alcohol, y por la misma razón, causante de violencia y hechos delictivos.
Y ni modo que sea invento.
Pues en esta ocasión, los dueños de clubes no fueron capaces de suspender la jornada futbolera, siquiera por respeto a una sociedad dolida que los ha enriquecido, sin límite en algunos casos.
Ello es prueba fehaciente de que grupos empresariales solo defienden, hablan y hasta protestan por el México de sus intereses cuando les conviene, y no por lo que afecta al sentimiento
social.
Ni siquiera cuando el fútbol prodiga suculentas ganancias provenientes de la pasión popular.
Pues esta es la clase empresarial que padecemos…muy, pero muy alejada de la mayoría nacional, aunque muy cercana a regímenes anteriores ahora descalificados por su insolvencia moral y política.
SUCEDE QUE
Por otra parte, si no hay razones que lo eviten, en las próximas 72 horas (y pue-que-antes), se anunciarán de manera oficial los movimientos en educación estatal, incluida la renuncia (y tal vez el relevo), del secretario Héctor Escobar y probablemente de Miguel Efrén Tinoco Sánchez, subsecretario de Educación Media y Superior, proveniente como recordáis de la Universidad Anáhuac, al igual que el ex subsecretario Julio Herminio Pimienta Prieto.
¿O’nde andas Julio?.
Y hasta la próxima.