Tampico, Tamaulipas.- Los congeladores se han vaciado y más de 2 mil quinientos despicadoras en Tampico se encuentran sin generar economía para sus hogares y hay riesgo para el ingreso a clases de los niños en edad escolar de esas familias pues no hay dinero ni para comer menos para uniformes.
Aureliana Nuñez dirigente de despicadoras en Tampico urgió a que fluyan los apoyos estatales y federales para un sector que está deprimido por la falta de trabajo.
La veda del camarón concluye hasta el próximo mes y en tanto no hay apoyos para el sector que literalmente se encuentra paralizado pues es poco el camarón de granja que es despicado provocando afectaciones a colonias como La Morelos, Pescadores y Cascajal, así como El Moralillo y Tamós en el norte de Veracruz. “Estamos muy mal porque ya no hay trabajo, las reservas de camarón se acabaron y las despicadoras y despicadores no tienen qué despicar. La mayoría son madres solteras y no van a tener para la escuela de los niños”, dijo.