ESTADOS UNIDOS.-Dirk Thelen es un hombre alemán de 35 años que tiene un pasatiempo un poco fuera de lo común; tras terminar su jornada como en una empresa de autobuses que transporta estudiantes, imprime figuras de sus personajes favoritos con sus cinco impresoras 3D. Sin embargo, la emergencia sanitaria por la que atraviesa el mundo le dio una nueva tarea: imprimir mascarillas.
La esposa de Dirk trabaja en un asilo para personas adultas mayores y un día le contó que no tenía equipo para protegerse de un posible contagio de coronavirus ya que estos productos alcanzaban precios demasiado elevados en el mercado. Así, se le ocurrió que Dirk, que ahora sólo trabaja medio tiempo, podía producir las caretas que sirven como barrera facial.
De inmediato se pusieron a trabajar y Dirk consiguió imprimir la primera mascarilla: su esposa se la puso y él roció un desinfectante en aerosol para comprobar que el líquido no traspasaba el plástico traslúcido recién moldeado por la maquina.
Cuando las cinco impresoras comenzaron a trabajar durante todo el día para hacer las máscaras, Dirk ha logrado hacer 700 piezas que ha repartido entre el personal que cuida y atiende a ancianos en distintos asilos de su localidad.
Este emprendedor también ha recibido solicitudes de manera personal a través de redes sociales; una mujer mayor de 60 años le pidió una para poder ir al médico más protegida, pues dijo que era inevitable la visita.
A raíz del éxito obtenido, Dirk ha invitado a la comunidad de aficionados a las impresoras 3D que se unan a la causa para que el impacto sea mayor, e incluso proporcionó los planos necesarios para hacerlo posible.
Thelen explicó a medios locales que por cada mascarilla pide apenas el dinero necesario para poder comprar más material, pero se dijo preocupado por el recibo de luz que llegará próximamente a su casa. “Cinco impresoras trabajando todo el día gastan mucha luz”, explicó y añadió que está en contacto con los proveedores del servicio para llegar a un acuerdo.
CON INFORMACIÓN DE SDPNOTICIAS