PÁNUCO.- El relleno sanitario de este municipio que prácticamente ya opera más amo un botadero por la falta de mantenimiento tiene prácticamente un año registrando emanaciones de un modo de manera intermitente.
Las emanaciones de humo provenientes del subsuelo, no terminan y hasta el momento no hay un proyecto para colocar una celda, para tratar los desperdicios.
Lo más preocupante es que constantemente se registran incendios, y los pobladores del Ejido Vega de Otates poblado ubicado a unos cuantos metros de este botadero, tienen miedo de que las llamas un día lleguen a sus viviendas.
Cabe destacar que diariamente llegan 60 toneladas de basura a este relleno sanitario y al no existir una nueva celda es muy difícil poder manejar los desperdicios.
En este sentido es lamentable que el titular de la dirección de Ecología Fernando Jiménez Lárraga no haya tomado cartas en el asunto y la problemática de este botadero se siga complicando.
De hecho es conocido que el citado funcionario no se siente muy atraído por los temas de Ecología y labora más como chofer del alcalde Fernando Molina Hernández, mientras el problema en el botadero sigue en aumento
Por ello que prácticamente está desbordado, no se cuenta con el personal ni el equipo suficiente para trabajar de manera adecuada en esta área y prácticamente cumple 7 años sin tener el menor mantenimiento desde la pasada también fracción a la actual.