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-Se agrega el capítulo “violación a la intimidad”. Se detalla que cometerá este delito:
el que revele, difunda, publique o exhiba mediante correo electrónico, mensajes telefónicos, redes sociales o por cualquier otro medio, imágenes, audio o video de contenido íntimo, erótico o sexual de una persona, sin contar como el consentimiento de la víctima.
“Las extorsiones van hasta 8 mil pesos para no difundir; las amenazan con subirlas a las redes y ahí ya nada lo borra; ya hay 28 casos de extorsiones, los delitos se incrementaron porque no hay liquidez” Nury Romero Santiago, Colectiva Feminista Tamaulipeca.
TAMAULIPAS.- Cuando “Isela” conoció a “Roberto”, (nombres ficticios) le pareció el chico más simpático, atento y guapo de la universidad, pronto iniciaron una amistad que al poco tiempo se convirtió en amor, cuenta ella; pero que sólo duró algunos meses.
Los celos y el control que Roberto quería imponerle sobre a quién hablarle, qué ropa usar y hasta cómo comportarse, pronto comenzaron a deteriorar la relación, que, aunque Isela trató de terminar, no podía, él la amenazaba con compartir fotos y vídeos íntimos si ella lo dejaba.
El pasado 15 de septiembre, la diputación permanente del Congreso de Tamaulipas, dictaminó procedente las reformas al Código Penal del Estado, para incorporar los delitos de ciberacoso y violación a la intimidad, imponiendo sanciones, que, de acuerdo con el diputado Javier Garza de Coss, son ejemplares y las más altas en los estados en que se ha tipificado ese delito.
Los legisladores acordaron, agregar el título “Delitos contra la Seguridad y Libertad Sexuales”, con el capítulo violación a la intimidad, donde se señala que cometerá este delito el que revele, difunda, publique o exhiba mediante correo electrónico, mensajes telefónicos, redes sociales o por cualquier otro medio, imágenes, audio o video de contenido íntimo, erótico o sexual de una persona, sin contar como el consentimiento de la víctima.
Para ello, se acordó una pena de 4 a 8 años de prisión y multa de mil a 2 mil veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización (UMA), misma que aumenta cuando la víctima sea menor de edad o incapaz, aumentando a 11 años, cuando exista parentesco, afinidad o civil, o relación sentimental.
En la misma sesión, se votó a favor de incorporar el título “Delitos contra la Seguridad en el Goce de garantías”, con el capítulo Ciberacoso, delito que cometerá la persona que hostigue o amenace por medio de redes sociales, mensajería instantánea, correo electrónico o cualquier otro medio digital y cause un daño en la dignidad personal, o afecte la paz, la tranquilidad o la seguridad de las personas, mediante el envío de mensajes de texto, videos, impresiones, gráficas, sonoras o fotografías.
Aquí las multas serían de 11 meses a tres años de prisión y multa de 4 mil 344 a 26 mil 064 pesos, así como de tres a cinco años de prisión y multa de 26 mil 064 a 86 mil 880 pesos cuando se trate me menor de edad.
En el tiempo en que a “Isela” le ocurrió todo eso, no sabía que existía una legislación que sancionara delitos contra la mujer, ella sin saber qué hacer, comenzó a deprimirse, sentía vergüenza de contarle a alguien lo ocurrido y siguió sometida a su victimario durante algún tiempo, hasta que se cansó de ella y buscó a otra novia.
Aunque ya siquiera le dirigía la palabra y con el miedo constante de que las imágenes y vídeos pudieran hacerse públicos, decidió abandonar la escuela y truncar sus sueños de ser una profesionista.
Hoy trabaja como dependienta en un negocio muy pequeño de aparatos electrónicos, con un sueldo inferior al que hubiera recibido, de haber terminado su licenciatura en arquitectura en la ciudad de Tampico.
Atendiendo las nuevas formas de comunicación, se reformó también en el Congreso del Estado, la Ley para Prevenir, Atender, Sancionar y Erradicar la violencia contra las Mujeres en el Estado, incorporando la violencia digital.
Entendida como el acto que se presenta a través de las tecnologías de la información y comunicación, mediante la divulgación, sin consentimiento, de textos, audios, videos u otras impresiones gráficas, de contenido íntimo, erótico o imágenes sugerentemente sexuales, verdaderas o alteradas, ya sean propias o de otra persona, que cause daño o perjuicio y que atenta contra su integridad y dignidad.
También en el sur del estado, la presidenta de la Colectiva Feminista Tamaulipeca, Nury Romero Santiago, informó que tienen registro de 28 casos, de jovencitas a quienes han extorsionado exigiendo dinero, para no publicar fotografías y vídeos íntimos.
“Las extorsiones van hasta 8 mil pesos para no difundir; las amenazan con subirlas a las redes y ahí ya nada lo borra; ya hay 28 casos de extorsiones, los delitos se incrementaron porque no hay liquidez”.
Señala que las víctimas, desde los 14 a los 26 años de edad, se sienten atrapadas y la gran mayoría de sus victimarios son ex parejas que buscan venganza al terminar la relación.
Para la activista, también es necesario que se otorgue mayor capacitación a los funcionarios de la Fiscalía, para evitar caer en revictimización de quien trata de denunciar, además de mejores herramientas a la policía cibernética.
“Lo que pasa es lo que llevó a exigir porque hay violencia cibernética; caen en el juego de un depredador sexual, cree en la pareja cuando realmente es un objeto; acuden a la Fiscalía General, pero a la policía cibernética hay que darles las herramientas”, señaló.
Sobre lo aprobado en el Congreso de Tamaulipas, Patricia Pimentel Ramírez legisladora de Movimiento Ciudadano, aclaró que hacen una robusta propuesta que incluye medidas de la Ley Olimpia, aclarando que “no es la Ley Olimpia que se está aprobando”.
La llamada Ley Olimpia, nace de la divulgación en redes sociales en 2014, de un vídeo íntimo de Olimpia Melo Cruz, por su ex pareja, sin el consentimiento de ella, lo que le generó burlas, humillación e insultos.
A partir de esa situación, Olimpia, junto con otras mujeres que habían sufrido situación similar, impulsaron una iniciativa en Puebla, para reformar el Código Penal, logrando que se discutiera y reformara en 2018.
La Ley Olimpia es un conjunto de reformas que reconoce la violencia digital a través de modalidades como la ciberveganza, ciberporno y el acoso sexual como un tipo de violencia contra las mujeres, las cuales deben sancionarse con multas económicas y penas de cárcel.
Apenas dos días antes de que se aprobaran en el Congreso de Tamaulipas estas reformas, la misma Olimpia Melo, pidió a la Comisión Estatal de Derechos Humanos, su intervención para que se escuchara a todos los colectivos feministas.
“Necesitamos que el Congreso del Estado convoque presencial o virtual a las compañeras, no solo es la foto, es la apertura a todas. El texto que se pretende aprobar tienen algunas cuestiones que nos preocupan y que lejos de ayudar nos podría criminalizar, por esta razón les pido por favor que nos ayuden a qué sea un proceso #NoSinTodas porque si no pierde todo el sentido colectivo y social”.
Y agregó, “En Sonora los diputados y Diputadas quisieron hacer a un lado el esfuerzo, en ego y violencia se ensimisman en su poder y no aceptan su error. La ley Olimpia no es una marca ni una moda, es una causa. Por favor les suplico a la Comisión de derechos humanos que haga voz y puente para todas. Un proceso abierto, legítimo, justo, debatible y no sin nosotras”.
Apenas unos días antes de la sesión en el Congreso, en Tampico, un grupo de feministas se manifestaron a través de pintas en el Palacio Municipal, ya el 15 de septiembre, el día en que se debatía el tema en el terreno legislativo, en Nuevo Laredo y Victoria, también hubo plantones y pintas.
En Nuevo Laredo, un grupo de 12 mujeres, realizó una manifestación pacífica en el quisco de la plaza principal durante aproximadamente una hora, para después realizar pintas en el monumento a Miguel Hidalgo, una de las jóvenes fue detenida por la policía.
Más tarde ese día en Victoria, otro grupo de jóvenes se manifestó en el paseo Méndez, portando cartulinas acusaron la violencia que las mujeres reciben; para posteriormente grafitear el monumento a los Niños Héroes que hay en ese lugar.
Hasta el año pasado, en la Fiscalía General de Justicia del Estado, apenas se tenían dos denuncias formales por la distribución de material que podría ser catalogado como pornográfico, entre ellos, fotografías y vídeos donde se exponían datos personales, que en ese momento se catalogaron como pornografía infantil o trata de personas.
A finales del 2017, en Victoria se alertó de la venta en redes sociales de la venta de fotografías y vídeos de al menos 350 jovencitas con precios desde los 50 a los 300 pesos.
A algunas de las jóvenes afectadas, e les exigía una cuota de 200 pesos para “borrar” las imágenes, por ese caso, sólo dos denuncias se interpusieron ante la Fiscalía.
Apenas dos años después en Chihuahua, fue aprendido Juan Manuel “N”, operador del llamado “Imperio Alpha”, un grupo cerrado de Facebook que se dedica a compartir y vender packs de jovencitas, muchas de ellas menores de edad, entre las que se encontraban jóvenes de Victoria, Tampico y Reynosa.
En enero de este año, Olimpia Coral Melo en su visita a Tamaulipas, denunció la existencia de al menos 200 mercados de explotación sexual digital, “van desde redes sociales, Facebook, Twitter, Instagram, e incluso algunas carpetas de Mega, que hace algunos meses se empezaron a difundir en la secrecía a través de WhatsApp y a partir de allí se empezaron a difundir los nombres y apellidos”, señaló en ese momento.
Aunque dijo que no existe un organismo oficial que realice un recuento de casos en los que se violente la intimidad de las personas, en el caso de Tamaulipas, explicó que, en Tampico, se detectó una práctica en el malecón de la playa Miramar, identificada en línea como “por debajo de la falda”.
“Meten los celulares por debajo de la falda de mujeres y niñas y esos videos se encuentran en mercado de explotación digital; basta con teclear por debajo de la falta Tampico y aparecen esos videos y no hay una sanción para las personas que lo hacen”.
En marzo de este año, a través de un movimiento nacional contra la violencia de género, en escuelas de nivel medio superior y superior, públicas y privadas en la entidad, alumnas denunciaron acoso sexual de parte de profesores, alumnos y trabajadores de las instituciones educativas.
En pintas en los baños, tendederos, cartulinas y hasta manifestaciones en las mismas escuelas y algunas plazas como la Juárez en Victoria, se expuso los nombres de algunos acosadores, lo que derivó en algunas separaciones de funciones, pero no alguna sanción
POR: PERLA RESÉNDEZ