CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- El alto costo del servicio de energía eléctrica tiene electrocutado al sector comercio donde los negocios se han visto en la necesidad de apagar aires acondicionados, por las facturas tan altas que tienen que pagar.
Daniel González Tirado, Regidor de la Comisión de Desarrollo Económico y Turismo en el cabildo e integrante de la CANACO, dijo que la crisis económica provocada por la pandemia del COVID 19, causó el cierre de muchos negocios, en tanto que los que sobreviven tienen que lidiar con altos cobros por los servicios.
“Muchos comerciantes de la calle Hidalgo y de la zona centro de la ciudad, tomaron la decisión desde hace tiempo de apagar los aires acondicionados, lo que permitió generar ahorros del 30 a un 40 por ciento en el recibo de energía eléctrica”, dijo
En estos momentos no hay ventas y lo poco que se recibe de los comerciantes se utiliza para realizar el pago de salarios de trabajadores y evitar pérdidas de empleos.
“En algunos casos los negocios tenían que pagar entre 20 a 30 mil pesos de energía eléctrica, donde además de tener tarifa comercial que es más alta que la doméstica, los dueños de comercios tienen que absorber otros gastos y seguir trabajando”.
Frente a esa situación algunos comerciantes buscan alternativas de ahorro de energía como la instalación de paneles solares, pero por no tener ventas es difícil hacer está inversión.
“En Victoria se estima que existen más de mil 300 negocios y la gran mayoría el pago del servicio de energía eléctrica es el principal dolor de cabeza”, dijo.
Abusa CFE del sector comercio
El líder de la Cámara Nacional de Comercio en Victoria, José Luis Loperena González, dijo que la Comisión Federal de Electricidad (CFE), es un organismo abusivo que no perdonó al sector comercio, ya que en la crisis provocada por la pandemia del COVID 19, ha cortado el suministro a los negocios que lucharon por evitar cerrar sus puertas.
Los meses más difíciles fueron a partir de abril hasta julio, cuando el gobierno estatal mantuvo el cierre de negocios considerados no esenciales, lo que originó que no hubiesen ventas y muchos prefirieron cerrar.
“Los pocos que sobrevivieron tienen que luchar contra la CFE, por los altos cobros del suministro eléctrico, por lo que a muchos se les complicó realizar el pago a tiempo”.
Pese a que no precisó el número de negocios afectados por esa situación, dijo que la suspensión del servicio de energía eléctrica se sigue realizando ya que esa empresa no perdona.
Sobre ello, el Diputado Local Miguel Gómez Orta, dijo que la CFE no solo afecta al sector comercio, también a quienes menos tienen, por lo que a través del Congreso del Estado, pedirá a ese organismo federal que revise sus tarifas.
“Nos han llegado a las oficinas de gestión familias muy pobres que antes pagaban menos de 100 pesos en los recibos de energía eléctrica y ahora les está llegando la factura por 500 o 600 pesos, cantidad que es mucho dinero para ellos porque son de muy escasos recursos”.
Es gente que apenas tienen dos focos en sus domicilios y uno que otro aparato eléctrico, por lo que le parece una injusticia lo que está haciendo el organismo.
“También puede ser que se deba a errores humanos, ya que la CFE contrata empresas externas para tomar las lecturas y en varias ocasiones las personas que envían no están capacitados para realizar bien su trabajo y cometen errores que tienen que pagar los usuarios”.
Por Antonio de la Cruz