Después de sostener tantas diferencias, finalmente Porfirio Muñoz Ledo, Yeidckol Polenvsky y Marcelo Ebrard, perdón, Mario Delgado, coincidieron en algo: en condenar la nueva intervención del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que ahora quiere cancelar el proceso interno para elegir, vía encuesta, la nueva dirigencia nacional de Morena.
Porfirio, quien en su pasado echeverrista nunca condenó la masacre de Tlatelolco, afirmó que los magistrados electorales cometen un ‘atropello’.
Marcelo Ebrard, perdón, Mario Delgado -que repite una y otra vez las frases del presidente Andrés Manuel López Obrador- aseguró que se trata de un ‘complot’.
Yeidckol, por su parte, burocrática como siempre, pidió al TEPJF que se apegara a las resoluciones y estatutos del partido de la 4T (cualquier cosa que eso signifique).
Por lo visto, el Tribunal Electoral, supuesto máximo órgano jurídico independiente, ya se contagió del virus morenista: el desbarajuste, el desorden, la pachanga.
De entrada, el TEPJF ordenó al Instituto Nacional Electoral (INE) organizar la elección interna morenista en tiempos en los que ya no procede un cambio de dirigencia partidista, ya que el proceso electoral federal 2020-2021 ya está en marcha. Esta es una irregularidad que puede establecer un precedente legal. El colmo es que ningún partido político, sobre todo los de oposición, cuestionó ni impugnó la decisión del Tribunal Electoral.
Eso no fue todo: el INE, que no está para aplicar encuestas en ningún partido, no fijó reglas al proceso interno de Morena. No hay fiscalización, ni topes de campaña, ni debates entre los candidatos, ni seguimiento de pautas publicitarias en redes sociales. No hay supervisión de las actividades proselitistas. Nada. El caos.
Es evidente, aunque los distintos liderazgos y tribus morenistas lo nieguen, que existe una mano o, mejor dicho, un ‘dedito’, que indica a las autoridades electorales hacer y deshacer en el proceso interno del partido de la 4T.
Ese ‘dedito’ dicta órdenes desde Palacio Nacional. Ese ‘dedito’ da instrucciones al INE y al Tribunal Electoral que, obedientes, un día hacen una cosa y al siguiente hacen otra. Por lo visto, ese ‘dedito’ prefirió, tras la encuesta de ‘reconocimiento’, que es mejor para Morena que se quede Alfonso Ramírez Cuéllar como dirigente a que llegue el incómodo Porfirio Muñoz Ledo.
LAS MENTIRAS DE FELIPE GARZA NARVÁEZ
Tal como se esperaba, Felipe Garza Narváez argumenta que renunció a la delegación federal de la Secretaría de Gobernación por ‘los tiempos políticos’. Según él, dimitió para aspirar a un cargo de elección popular.
Esa es su versión y es una rotunda mentira. A Felipe Garza Narváez le pidieron la renuncia la semana pasada, El gobierno federal de la 4T no está nada contento con la labor que desempeñó en tierras tamaulipecas. Le perdieron la confianza.
Para comenzar, ¿por qué el ahora ex delegado federal de la Segob envió su comunicado de renuncia a los medios de comunicación a tan altas horas de la noche? El ex funcionario informó su renuncia ¡¡¡a la una y media de la madrugada!!!… ¿Cuántos whiskies se necesitan para enviar un comunicado a esas horas?…
En todo caso, ayer lunes hubiera convocado a una rueda de prensa en la capital del estado para anunciar, de manera franca, su dimisión a la delegación y de paso expresar que quiere ser candidato a la presidencia municipal o la diputación federal por Ciudad Victoria.
No lo hizo así porque sabe que su paso por la representación de la Secretaría de Gobernación en Tamaulipas no solo fue gris, sino ineficaz -¿y desleal?- con los objetivos y pretensiones de la Cuarta Transformación.
Por cierto, quien se quedó sin ‘padrino’ para ser (ja, ja, ja, ja) candidato de Morena a la alcaldía de Altamira fue el comisariado ejidal Pedro Carrillo Estrada.
Así es: Pedrito, quien ha vivido a expensas del apellido que hizo brillar su hermano Sergio (qepd), se la ha pasado difundiendo la versión de que él será el candidato de Morena a la presidencia municipal altamirense (ja, ja, ja, ja).
Por supuesto, es puro ‘bluff’, una vil fanfarronada, faramalla pura. Pedro Carrillo, que era impulsado por Felipe Garza Narváez, no trae nada en el morral, salvo sus típicas mentiras que solo ‘impresionan’ a los despistados de siempre.
PRI NO DA PERDÓN NI OLVIDO A ‘XICO’
En rueda de prensa encabezada por su dirigente, Edgar Melhem, los priistas tamaulipecos exigieron iniciar una auditoría y ‘una investigación seria’ sobre los dos años en que Xicoténcatl González Uresti estuvo al frente del gobierno de Ciudad Victoria.
‘Aquí, en el Ayuntamiento de Victoria, no va a haber perdón ni va a haber olvido’, afirmó Edgar Melhem, que estuvo acompañado no solo por integrantes del comité estatal, como Mayra Ojeda, Carlos Solís Gómez y Juan Machuca Valenzuela, sino por ex presidentes del tricolor estatal, como Enrique Cárdenas del Avellano y Sergio Guajardo.
También asistieron la diputada federal Mariana Rodríguez Mier; el nuevo líder del MT, Arturo Núñez; el dirigente del priismo victorense, Horacio Reyna de la Garza; Alejandra Cárdenas Castillejos; y los regidores Izcalli Anzures Silva y José Benites Rodríguez, entre otros. Buena convocatoria tricolor para exigir cuentas sobre ‘Xico’.
JAVIER CÓRDOBA, NUEVO DELEGADO DE LA SEGOB
El nuevo delegado federal de la Secretaría de Gobernación en Tamaulipas tiene nombre y apellido: Javier Córdoba.
¿Quién es él? Es amigo de Héctor Garza, que -no se debe olvidar- ahora despacha como Oficial Mayor de la Segob. La llegada de Javier Córdoba a la delegación del Ministerio del Interior es producto de los acuerdos sostenidos por ‘El Guasón’ en la estratégica dependencia que encabeza Olga Sánchez Cordero.
Y PARA CERRAR…
Mon Marón, que anda muy bien en los sondeos para alcanzar la candidatura del PAN a la diputación federal por el Octavo Distrito, difundió ayer por redes sociales su primer video -que forma parte de una serie de cinco- como presentación de su informe de labores en el Congreso del Estado.
El viento del cambio sopla a favor de Mon…
POR HÉCTOR GARCÉS