TAMAULIPAS.- Las dos principales fuerzas políticas del estado están enfrentando de manera muy distinta la fase previa a las campañas.
La búsqueda de los reflectores, y lo que por momentos parece una carrera desbocada entre tantos morenistas, contrasta con el bajo perfil que ha sostenido la terna panista de la que saldrá el candidato a la gubernatura de Tamaulipas. Sí tiene que ver con el momento que vive cada partido y sus necesidades específicas, pero también es una cuestión de estilos.
En la 4T, lo han dicho hasta el cansancio, hay vía libre para que quien se sienta con posibilidades y tenga interés, compita en el proceso interno sin importar siquiera si se trata de militantes, simpatizantes o hasta integrantes de otros partidos. La puerta de entrada a Morena es muy ancha.
Que sean tomados en cuenta a la hora buena por la dirigencia y el gran elector de Palacio, es otra cosa, pero nadie -hasta ahora- ha levantado la voz para apaciguar a los suspirantes más débiles, que irónicamente son los que más ruido hacen.
El PAN avanza hacia el 2022 por un camino muy distinto. Desde un principio, el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca mandó el mensaje de que él y nadie más marcaría la pauta en la sucesión. Así puso sobre la mesa los nombres de los prospectos, con especial énfasis en el de César Verástegui, su Secretario General de Gobierno.
Pero también instaló las condiciones para que se pudieran subir a la competencia Jesús Nader y Gerardo Peña. No hay en el panismo espacio alguno para la rebeldía, ni para la improvisación. Por eso, el alcalde de Tampico, el diputado federal, y hasta el Secretario han cuidado tanto sus palabras, y han atesorado sus silencios.
Quizás por el nivel de ebullición que ha alcanzado el proceso interno de Morena -estamos a nueve meses de la elección- a Mario Delgado le urge sacar al candidato. Que truene lo que tenga que tronar, pensará el dirigente, para empezar a reparar lo que haya que reparar.
Si como todos dicen, en Palacio Nacional se va a tomar la decisión de quien abanderará la cuarta transformación en Tamaulipas, las encuestas solo cumplirán con el cometido de limpiar el proceso para que se le levante la mano al elegido.
Empezará al interior del partido la tarea de medir los alcances de los inconformes, que seguro los habrá. En el PAN, en cambio, no parecen tener prisa. Primero se confirmará la alianza con el PRI y el PRD, por allá de fin de año, y después, tras emitirse la convocatoria, se conocerá al candidato. Difícilmente habrá pataleo tras el anuncio; esa capacidad de reagruparse es la apuesta del panismo para hacer frente a un adversario que, si se descuida, puede llegar a su cita más importante de la historia con graves divisiones internas. ¿Cuál de los dos estilos de conducción política arrojará más resultados? El 5 de junio por la noche lo sabremos.
MURIÓ ORLANDO ORTIZ
El fin de semana se confirmó el fallecimiento de Orlando Ortiz. Originario de Tampico, durante más de 50 años publicó novelas, cuentos, crónicas y cómics.
En paralelo a su creación literaria, fue generoso con las nuevas generaciones de autores, impartió con regularidad talleres en todo el país, incluido su estado.
Deja, además de su destacado trabajo narrativo, una obra invaluable para nuestro acervo cultural: el Ensayo Panorámico de la Literatura en Tamaulipas, integrado por cuatro tomos, en los que registra, desmenuza, y por momentos cuestiona, los textos de una inmensa lista de autores tamaulipecos desde principios del siglo XIX hasta nuestros días. Un auténtico tesoro.
CATALEJOS / MIGUEL DOMÍNGUEZ FLORES
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— Expreso (@ExpresoPress) January 5, 2021