TAMAULIPAS.- Carol Acuña Vázquez, nacida en Ciudad Victoria hace 13 años: una jóven sencilla, responsable, guerrera y amante de la justicia. Con su corta edad, busca cumplir uno de sus sueños que es jugar al fútbol profesional en la máxima división del fútbol mexicano femenil y aunque aún le resta mucho camino por recorrer, ya está en el equipo de América Sub-17, institución a la cual ha apoyado desde pequeña.
Desde chica ha pensado en dedicarse al deporte que tanto le apasiona, pero a su vez, tiene un curioso sueño, pues al ser ‘luchadora de la justicia’, en algún momento asegura que podría presentar pruebas para ser policía, “no es broma, en serio me gustaría serlo, sé que es peligroso pero me gusta mucho defender a las personas buenas, no me gustan las injusticias”, comentó quien también piensa estudiar nutrición.
Con esa convicción y valentía, Carol no se detendrá por sus sueños, eso es algo seguro, pues no sólo es valiente para estar dispuesta a arriesgar su vida y ser agente policial, también lo es para los retos que le pone la vida, el deporte y el fútbol.
Desde los cinco años, Carol encontró el gran amor de su vida, que es el balompié, todo por herencia de su familia, pues su hermano mayor era a quien le gustaba practicar dicho deporte, por lo que ella veía y se interesó en hacer lo mismo en uno de los parques que está en la Colonia Azteca, zona en la que ella creció.
“Yo a veces salía detrás de él, yo me interesé mucho porque veía que se emocionaba. Un día le dije a mis papás, ellos jamás me dijeron que no, me mandaron con un profe que entrenaba cerca de ahí, los primeros días entrenaba con tenis porque no tenía ni tachones, porque todo fue muy rápido”, expresó.
Desde ese momento, Carol descubrió lo que era entrenar, patear un balón y no soltó lo que se convirtió en su más grande pasión, y aunque ha podido practicar otros deportes como handball y atletismo, en los que era buena, el fútbol le ganó a la mente y el corazón.
Así comenzó la historia deportiva de Carol Acuña quien con 5 años, inició su etapa de formación y aprendizaje, la cual llevó con diferentes entrenadores como Marco Zavala en Fuerza Naranja, Jesús Heredia en Fuerza Elite para después pasar a Correcaminos con Alejandro Pozos y Mario Sarmiento.
Machismo le afectó varias veces
Jugaba con puro niño casi siempre, al menos que estuviera en algún torneo femenil a los que era invitada, pero siempre tuvo la valentía para no achicarse, “era difícil, pero aprendí mucho, ahora sí que me ayudó todo eso a no tener miedo”, sus compañeros siempre la respetaron.
Pero a pesar de eso, hubo momentos en los que el machismo apareció; en una ocasión por increíble que parezca, un entrenador rival se negó a jugar contra su equipo si ella estaba en el campo era una final de Copa UAT, a tal punto que amenazó con protestar el juego, “no me dejó jugar, mis compañeros apoyaron pero fue mejor que me saliera, no entiendo porque hizo eso, me molestó demasiado”, apuntó, mientras que indicó que la otra ocasión fue la directora de su escuela quien, “no quiso que jugara fútbol en un torneo con el equipo de la escuela”.
No se detuvo; llegó al América
A pesar de ese tipo de acciones, Carol contó con el apoyo de toda su familia y se mantuvo centrada en buscar su sueño; en años recientes estuvo en Correcaminos Femenil, equipo en el que participó en diferentes torneos estatales e incluso nacionales, además formó parte de la Selección Tamaulipas con la que ganó medalla de plata recientemente en Nacionales CONADE.
El talento de Carol era evidente desde esos momentos, marcaba diferencia a pesar de su edad, pues con 12-13 años, le hacía partido a jóvenes de entre 15 y 20 años en los diferentes torneos.
Pronto se enteró que había visorias; con el auge que había de la la Liga Mx Femenil, América decidió buscar talento en Ciudad Victoria y Carol no dudó, “yo había estado en visorias para Selección Mexicana hace años que se hicieron aquí, me dijeron que no iba a ser seleccionada porque estaba chica, a mi no importó y yo seguí intentando, en las visorias del América de verdad que fue muy pesado todo ese proceso”.
Mil jugadoras buscaban lugar; momentos de incertidumbre
En total, Carol tuvo que superar a más de mil jugadores, pues en Victoria asistieron de otros lugares del Estado y de la zona noreste, mientras que al pasar los filtros, tuvo que asistir a la Ciudad de México en par de ocasiones, y en esas pruebas asistieron aún más futbolistas, por lo que al menos, un millar de jugadoras se quedó en el camino en los diferentes procesos.
Tras tres largos selectivos, finalmente Carol junto a otras jugadoras tamaulipecas lograron quedarse en el Club América, pero la incertidumbre fue demasiada, tuvieron que pasar varias semanas, e incluso llegó a pensar que no le llamarían.
“Pasaron muchas semanas después del último filtro, era mucha la expectativa, hasta que un día mi mamá me dijo, ‘necesito hablar contigo’, yo no pensaba que era eso, me llegó de sorpresa que le habían hablado para informarle que ya estaba dentro, ‘te nos vas a ir’, me decía mi mamá”, expresó.
“Yo lloré, fue algo bonito el escuchar la noticia, pensé en todo lo que había hecho, los sacrificios que tuvimos que pasar mis papás, mi familia y yo para esto”, añadió.
Pensaron en no dejarla ir
El destino le puso una pequeña dificultad a la victorense. Judith Araceli quien se dedica a la venta de artículos y Marco Antonio que es mecánico, padres de Carol, le dudaron y pensaron en no dejarla ir a la Ciudad de México por el tema económico, “mis papás se puede decir que viven al día, sí sé que es complicado muchas veces ganar el dinero, estuve cerca de no venir al América, sé que era difícil para ellos esa decisión”, detalló.
Pero lo guerrera no lo trae de la nada, pues sus papás, le han puesto el ejemplo y aunque hubo dudas, al mirar convencida a Carol, ellos decidieron aventurarse también a dejarla ir, redoblar esfuerzos y así, apoyarla en lo que necesitara.
“Yo les decía que este era mi sueño, yo desde chica le iba al América, pero también quería jugar fútbol profesional, este era el paso que buscaba, pero a su vez sabía que era difícil… al final ellos me apoyaron, como ha sido siempre, yo les prometí que iba a dar todo de mí, que iba a esforzarme para que todo lo que hicieron y hacen, valga la pena”, pronunció.
Finalmente logró un paso muy gigante. Se integró al equipo y empezó los entrenamientos para después empezar su preparación para lo que sería el primero e histórico torneo de preparación Sub-17 Femenil de la Liga MX.
Fue el sábado 9 de octubre del 2021 cuando Carol Vázquez hizo su debut en esta división, fue un juego contra Pumas en el que empataron a cero goles, “fue una de las mejores cosas que he vivido, me sentí nerviosa, pero disfruté el momento”.
Quiere llegar a Europa
Carol sabe que tiene que ir paso a paso, por lo que se ha propuesto a mejorar cada vez más para ganarse un lugar en el equipo, “quiero crecer más deportivamente, sé que estar en este equipo no es cualquier cosa, quiero ganarme más minutos, al final yo soy una de las más jóvenes y espero seguir aprendiendo”.
“Espero a mediano plazo llegar a debutar en la Liga Mx y estar en la Selección Mexicana, pero si me dices un sueño más grande, es sin duda llegar a Europa, yo quisiera estar en el equipo de Barcelona”, apuntó.
Agradecida con su familia
Carol sabe que no ha logrado ‘nada’, pues tiene mucho qué recorrer y aunque es un proceso que puede tardar, ella no se rendirá por nada del mundo hasta cumplir sus metas deportivas y personas, pues fue una promesa que se hizo.
“Yo quiero regresarle a mis papás todo lo que han gastado en mí, porque realmente ellos se han partido la madre por mis hermanos y por mí, yo se los dije -entre risas- que cuando ganara mucho dinero yo les iba a regresar lo que gastan, pero más allá de eso, quiero cumplir mis sueños, dejar a mi familia orgullosos, no me voy a rendir”, manifestó.
“Agradezco a mis papás por todo el apoyo. A mi mamá le digo que: muchas gracias por todo lo qué haces por mi, que desde pequeña me enseñaste a nunca rendirme y siempre ser una fregona como tú y sabes que te quiero y te amo y que muchas gracias por todo el apoyo que me das. A mi padre: gracias por enseñarme a jugar, a no rendirme y siempre estar ahí, te quiero papá. Y a mi hermanos: son unos guerreros y los quiero mucho”.
“También quiero agradecer a todos los entrenadores que he tenido, pero en especial al profesor Chuy Heredia quien me hizo crecer mucho, de verdad que estoy agradecida”, expresó.
¿Qué le dirías a la Carol de hace cinco años? se le hizo una última pregunta, “nada, que eres una guerrera, una chingona y que nunca te rindas, no le diría más porque no me arrepiento de nada de lo que hice ni lo que he vivido, todo me ha ayudado a crecer, a madurar y valorar”, indicó.
Así terminó la entrevista a Carol Vázquez, quien con 13 años ha demostrado que es una persona madura mentalmente pues todas las experiencias vividas, le han hecho ser mejor persona y sobre todo a valorar muchas cosas que tal vez anteriormente no lo hacía.
Carol es un orgullo para su familia, para sus amigos y todos los que la conocen, con 13 años ha logrado grandes cosas y va por más, espera convertir ese sueño que creció en las calles y parques de la Colonia Azteca en algo tan grande como el Estadio Azteca, lugar en el que espera algún día jugar con el primer equipo femenil del América y la Selección. Sueño de una niña con alma de guerrera que no se detendrá hasta cumplirlo.
POR DANIEL VÁZQUEZ
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— Expreso (@ExpresoPress) January 5, 2021