Desde la perspectiva ciudadana muchas veces se piensa que cualquier persona puede trascender y ganar posiciones en la política, y es cierto, sin embargo se necesita de formación y vocación.
No se trata de solo ser leal a un partido político o de relaciones empresariales, porque no solo es llegar, el mantenerse y dar resultados positivos implican trabajo constante y un perfil real de servicio y hacer equipo, quien trabaja en función al beneficio personal o de unos cuantos, son quienes dan malos resultados o toman decisiones que afectan, en lugar de beneficiar a la población.
Es importante por ello que los ciudadanos nos interesemos en conocer el perfil y preparación de nuestros candidatos y representantes para ayuntamientos, el Estado y las legislaturas.
Reflexionaba sobre ello, porque con el inicio de una nueva legislatura se realiza
el acomodo de posiciones para asignar las Presidencias, Secretarías y Vocales en las 32 comisiones ordinarias y 6 de competencia constitucional, creadas en el Congreso de Tamaulipas.
Por la importancia y trascendencia en la actividad política y en la gestión de las administraciones municipales y la Estatal, hay algunas más “peleadas” que otras, y las principales fuerzas políticas buscan el consenso y la repartición equitativa de los espacios.
Sin embargo, más allá del interés político y la capacidad de negociación, lo que realmente se debería valorar es la experiencia y formación profesional de los diputados, la mayoría de las ocasiones se llega a una Curul por su liderazgo o la trayectoria dentro de los partidos, y respaldados por el voto mayoritario en
las urnas, pero otros perfiles llegan por acuerdos políticos, compadrazgos o impulsados por sectores productivos que buscan estar representados en el lugar donde se toman las decisiones en favor de Tamaulipas.
Sea cual fuere el origen o causa por la que se está en el Congreso del Estado, hay que revisar el perfil curricular de los legisladores y trabajar en función a su capacidad y experiencia, para rendir el mejor de los resultados a los tamaulipecos, de nada nos serviría a los ciudadanos tener un legislador en una Comisión de la que poco se conoce.
Sería inútil tener a un profesionista que poco o nada sabe de temas de la salud participando en la Comisión de Salud, o un profesional del área de humanidades peleando un espacio en presupuesto y cuentas públicas si su experiencia no está en el área de los números, por más buenas intenciones que tengan.
En las próximas semanas el tema tomará relevancia y será oportuno que los ciudadanos estemos enterados de cómo será el acomodo en el Congreso de Tamaulipas, pues de ello dependerá en gran medida que la 65 Legislatura rinda buenos resultados para todas y todos, sin olvidar que los verdaderos resultados no precisamente vienen en una elección, si no después de ella, con la decisiones y acciones que se tomarán desde el lugar en el cual los ciudadanos nos pusieron
y esperan un buen desempeño en el ejercicio de nuestras funciones como servidores públicos.
por CARLOS FERNÁNDEZ
@carlosfdza




