TAMAULIPAS.- En la década de los noventa se comenzaron a contar las muertas de Juárez, una tragedia que tres décadas después todavía se investiga, que no se olvida y de la que derivó el término feminicidio, asesinato por razón de género, por el hecho de ser mujer, sustentado legalmente a iniciativa de la feminista Marcela Lagarde.
Ahora, en México se reportan casi 12 asesinatos de mujeres cada día, tan solo de enero a agosto el Sistema Nacional de Seguridad contabilizó casi 3 mil muertas, pero solo 700 fueron registradas como feminicidio.
En ocasión de la conmemoración Día de Muertos, que en nuestro país se mantiene como una tradición viva, las colectivas feministas, acompañantes de muchas víctimas de desaparición, violencia y muerte, nos recuerdan que “No alcanza el cempasúchil para guiar a todas las que nos quitaron”.
Estos días de puente, donde muchas familias aprovecharon para descansar o viajar, las defensoras de los derechos humanos de las mujeres no descansan y aprovechan la emotiva celebración para montar altares de muertas, nombrar a las desaparecidas y volver a exigir justicia por ellas, por muchas que, como remarca Frida Guerrera de la colectivas Ni una más y Voces de la Ausencia, “no murieron, las asesinaron”.
Al mismo tiempo de nombrar a las muertas, las feministas deben defenderse del discurso misógino presidencial, que una vez más intenta borrarlas, minimizar su lucha y estigmatizar su trabajo colectivo.
De nuevo López Obrador ha dejado claro que no esta de lado de las mujeres, el necio supone que detrás de cada movimiento existen una acción partidista que busca partirle su proyecto, que el fin del feminismo es atacarlo a él, no ve ni escucha la lucha, no entiende, que no entiende la sororidad que hermana a las mujeres, que arropan a las víctimas y sus familias, ataca a quienes debería agradecer porque hacen más trabajo desde la acción civil, que lo que el Estado debería estar haciendo por las mexicanas más vulnerables.
Las mujeres están más expuestas a las violencias machistas cuando desde el poder se invisibiliza el problema y se ataca a las que defensoras, a las colectivas.
En este día de Muertas, si místicamente regresan algunas, seguro se unirán a las marchas feministas y alzarán la voz por todas las que siguen aquí, con alguna pena. Ojalá que las voces del más allá, cambien la historia, porque sin estrategia ni siquiera el reconocimiento del problema, mañana habrán asesinado a once más.
EN BOCA DE TODAS / GUADALUPE ESCOBEDO CONDE
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— Expreso (@ExpresoPress) January 5, 2021