Clasificar los proyectos insignia del Gobierno Federal como casos de “seguridad nacional”, evidencia una vez más que no importa sobre qué, sobre quién ni pese a qué, las obras de la 4T van porque van.
La justificación que dio el presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR ante el decreto de seguridad nacional de sus proyectos más importantes, es que busca acelerar los procesos burocráticos, pero todos los mexicanos sabemos que basta con que levante un dedo para que cualquier tipo de trabas, limitantes o contratiempos, sean resueltos a la brevedad, por lo que suena falso -por decir lo menosque esa sea la razón verdadera.
Expertos analistas en temas legales, no sólo de México sino de leyes internacionales, han opinado sobre este polémico suceso y es que más allá de lo que se diga, lo que parece es lo que sí preocupa, en muchas ocasiones se han visto las decisiones del Presidente, y sobre todo las acciones del Presidente, como destellos te autoritarismo, o sea que por momentos se enseña el “cobre” como dictador, y ésta es justo una de esas veces.
Y lo que implica este decreto es que cualquier autorización, análisis, estudio, investigación, o mero papeleo burocrático que requiera cualquiera de sus obras insignia -el aeropuerto de Santa Lucía, refinería de Dos Bocas, o el Tren Maya por mencionar algunosdeberán estar resueltos en un plazo de cinco días pues el documento advierte que “transcurrido dicho plazo sin que se emita una autorización provisional expresa, se considerará resuelta en sentido positivo”.
Así como lo lee, o me dices que sí o el que calla otorga.
Es increíble que en nuestro país aún no se haya legislado para frenar ese tipo de acciones, en las que se impulsan políticas públicas -o mega obrassin estudios de impacto, sin medición de consecuencias, y eso sí, con candados para “o lo haces o lo hacen”, y ni para dónde hacerse.
Justo eso están queriendo hacer los legisladores de Morena en Tamaulipas, han impulsado dictámenes que en apariencia son bien intencionados pero que carecen de todo sustento, sobre todo porque eliminan los impuestos -cosa sobre la que cualquiera estaría de acuerdopero el problema es que no justifican de dónde va a salir el recurso que se necesita para temas de seguridad pública, salud, educación, infraestructura y un largo etc., porque el dinero no está llegando de la Federación y aquí no habrá de dónde sacarlo.
Este debería ser el mejor momento para empezar a legislar sobre proyectos que requieren fuertes inversiones, obras millonarias que deberían sí o sí tener
toda una serie de procesos inalterables, ni porque sean de “seguridad nacional”, y tener los candados para que cualquier otra autoridad que llegue después, no pueda simplemente abandonarlos y empezar en otro punto un proyecto similar o diferente.
Lo digo por el aeropuerto de Texcoco que llevaba un 30% de avance en su construcción, se abandonó y se empezó otro prácticamente de cero, y que no es tan funcional, en Santa Lucía hay millones y millones perdidos, más los millones y millones invertidos, más los millones y millones que faltan, pero eso sí, la pobreza es culpa de la pandemia o de los neoliberales.
¿Usted qué opina?
POR OMAR REYES
omarereyes@gmail.com
@Omar_Reyes