CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Una red criminal dedicada al tráfico de personas, presuntamente vinculada a la masacre de migrantes ocurrida hace un año en Camargo, fue detenida en Guatemala.
Elementos de la Policía Nacional Civil, llevaron a cabo 19 operativos en la comunidad de Comitancillo al occidente del país, de donde eran originarios la mayoría de los migrantes que fueron asesinados y sus cuerpos calcinados en una brecha de Santa Anita en Camargo.
De acuerdo con información de la agencia Reuters, como resultado de los operativos, se detuvo a diez personas, entre ellos dos mujeres, quienes enfrentarán cargos por los delitos de tráfico de personas, asociación ilícita y lavado de dinero.
“Se estableció que la estructura criminal captaba a las víctimas, acordando con ellas un pago que oscilaba entre los 95,000 quetzales (casi 12,000 dólares) y los 120,000 quetzales (15,000 dólares) para trasladarlas hacia el territorio estadounidense”, detalló la autoridad guatemalteca.
Explicaron la banda denominada “Los Coronado-Miranda”, es liderada por el exalcalde de Comitancillo, Ramiro Coronado Pérez y tres abogados. La identificación de los presuntos responsables provienen del trabajo conjunto con la agencia Home Land Security Investigations” de Estados Unidos, informó el Ministerio Público.
“Son 2 familias las que componen esta estructura. Sin duda alguna van a seguir habiendo algunos otros hallazgos y van a haber capturas. Se tiene conocimiento también que dentro de las capturas hay 3 abogados, la estructura sí era una estructura criminal conformada por una parte operativa y una que veía la parte financiera y de lavado”, aseguraron.
El 22 de enero fueron localizados los cuerpos de 19 personas, en una brecha de Camargo, cerca de los límites con Nuevo León, 15 fueron encontrados en la caja de una camioneta, con 113 impactos de bala, dos más en la cabina de la misma y otros dos cerca de la puerta del piloto y copiloto.
Entre las víctimas se encontraban 16 guatemaltecos, un salvadoreño y dos mexicanos. Por estos hechos, fueron detenidos 12 policías estatales, que, de acuerdo con la Fiscalía de Tamaulipas, los efectivos policiales dispararon contra los migrantes y después les prendieron fuego.
Apenas el pasado 19 de enero de este año, la audiencia intermedia contra los 12 policías, fue diferida por segunda ocasión por un juez de control, la primera estaba programada para el 8 de diciembre.
En esa ocasión, tres abogados de la defensa, argumentaron no haber tenido acceso a todas las pruebas, entre ellas algunos vídeos, presentadas por la Fiscalía en contra de los elementos polciales.
En esta segunda audiencia, el argumento fue similar por parte de uno de los abogados, por lo que el Juez de Control concedió un nuevo plazo a la defensa para revisar las pruebas de la Fiscalía, fijándose el 3 de febrero como la nueva fecha para la audiencia.
Las investigaciones también arrojaron como parte de los resultados que una de las camionetas encontradas en el lugar, fue ubicaba donde fueron rescatados, el 6 de diciembre del año pasado, 66 extranjeros por elementos de la Policía municipal de Escobedo y el Instituto Nacional de Migración (INM).
Por estos hechos, el INM cesó a ocho funcionarios de la Oficina de representación en el estado de Nuevo León, al considerar que hubo una “omisión en los procedimientos administrativos y protocolos en la Ley de Migración y su reglamento”.
POR PERLA RESÉNDEZ
EXPRESO-LA RAZÓN
