La tendencia en el precio de futuros del petróleo continúa elevándose; el día de ayer, jueves 3 de febrero, el precio del barril de petróleo West Texas Intermediate alcanzó niveles de precios que no se observaban desde la primera mitad de 2014, superando 90 dólares por barril. El incremento del petróleo es algo que se observa desde abril de 2021, y que ha sido en principio motivado por un crecimiento en su demanda por la reactivación de la economía mundial. Actualmente, esta presión permanece y, además, se suma la incertidumbre debido al conflicto que ha surgido en Asia, lo que sin duda podría presionar a que el precio del petróleo siga creciendo.
La subida del precio del petróleo tiene dos efectos para la economía mexicana; primero, es que permite un incremento en los ingresos públicos por la venta de petróleo, y segundo, afecta los precios de los productos que se derivan del petróleo, tal es el caso de la gasolina. En lo que respecta al incremento de las gasolinas, su efecto es generalizado a prácticamente todos los bienes y servicios que se producen y se comercializan, provocándose un alza de la inflación.
Por lo anterior, se ha observado que el crecimiento del precio del petróleo se ha sincronizado con el crecimiento de los precios en México, lo que ha provocado que la inflación se desvíe del objetivo del Banco Central que es de tres por ciento, incluso en el mes de diciembre había superado más del doble la tasa objetivo, ubicándose en niveles de 7.4 por ciento a nivel nacional y en Tampico 7.3 por ciento.
Los productos alimentarios son los que más han incrementado sus precios en el último año. En diciembre de 2021 estos habían alcanzado niveles de 10.7 por ciento a nivel nacional y 11.2 por ciento para el municipio de Tampico. El rubro de transporte fue el segundo con mayores incrementos en los precios; a nivel nacional se ubicó en 9.9 por ciento y en Tampico en 9.4 por ciento. En el sector educativo y vivienda es donde menores incrementos de precios se han observado tanto a nivel nacional como en nuestra región.
El inicio de 2022 se ha visto marcado con un ligero decrecimiento en los precios alcanzando una tasa de 7.21 por ciento, pero hay que tener en cuenta que la incertidumbre por el conflicto en Asia podría provocar que los precios del petróleo continúen, por lo que las presiones sobre la inflación podrían prolongarse.
Aunque hay que reconocer que el Gobierno Federal subsidia las gasolinas para evitar que el incremento del petróleo afecte aun mas la economía familiar, es posible que siga elevando el subsidio afectando el presupuesto público. Además, también hay que reconocer que existen otros mecanismos de transmisión del incremento del precio del petróleo, y que tienen que ver con los productos derivados del mismo.
Así que es posible que de continuar con el escenario actual, la estabilización de precios se prolongue afectando a la población más vulnerable en el país. Usted ¿qué piensa?
Por Jorge Alberto Pérez Cruz