El tiempo no existe, solo la medición del movimiento, sin embargo, a veces percibimos que este transcurre con rapidez y en ocasiones con lentitud, apreciación que, como muchas otras cosas, es falsa ya que los días y las horas siempre son iguales.
Por eso, como dice la canción, resulta importante la virtud de conocer con paciencia la percepción del devenir.
Aludimos al tema a propósito del relevo del gobierno de Tamaulipas. Mientras que para los que se van, el tiempo parece transcurrir a la velocidad de la luz, a los morenistas y en particular a los cercanos del gobernador electo Américo Villarreal, la fecha de resolución de las impugnaciones les parece que lo hace en cámara lenta.
Los 87 días que restan para el 30 de septiembre, cuando concluirá el sexenio panista, los albiazules sienten que faltan solo unas horas para entregar las oficinas, a los que llegarán, sin embargo, la sensación que tienen es de una eternidad, sobre todo aquellos interesados en formar parte del gabinete del futuro mandatario tamaulipeco.
A propósito, el papel de la regidora del ayuntamiento de Tampico, Mónica Villarreal, cobro una importancia especial tras el triunfo de Morena. Los aspirantes a cargos públicos saben que ser amigo o amiga de la hermana del entrante jefe del ejecutivo estatal tiene una particular relevancia en el cambio de gobierno pues puede abrirles las puertas a sus pretensiones políticas.
Una de ellas debe de ser la exalcaldesa Magdalena Peraza, quien, como se sabe, le abrió un espacio a la edil porteña cuando estaba al frente del gobierno de la ciudad, favores que no se olvidan, aunque tampoco se olvida que Magda haya abandonado las filas de la 4T para sumarse a las de Acción Nacional.
¿Se lo perdonarán? Todo indica que no, quizá podrían ayudarle a conectar o reconectar a la nómina pública a algunos o a algunas de sus recomendados y recomendadas, para regresarle el favor, pero el hecho de haberse quitado la casaca guinda para ponerse la de color azul conlleva algunas dificultades, aunque en política ni los amigos ni los enemigos son para siempre.
Los que parece que todo apunta a que serán bien compensados son los jubilados petroleros de ciudad Madero.
Igual que todos los que se la jugaron a lado de la Cuarta Transformación, entre ellos los integrantes del grupo del exdirigente municipal del PRI, Jorge Ruvalcaba, seguramente recibirán en su momento el premio a las tareas de apoyo y promoción del voto a favor de Américo que realizaron a lo largo de la campaña electoral.
En otros asuntos, como ha sucedido con Alito Moreno y Marko Cortés, a quienes exigen la renuncia al cargo de dirigente estatal de PAN, Luis René Cantú Galván les ha respondido que permanecerá al frente del partido hasta que haya terminado el periodo para el que fue electo, no obstante, a partir del primero de octubre tal vez el Cachorro cambie de opinión y se dedique exclusivamente a la diputación estatal.
Antes de concluir, el rescate de las plazas que realiza el gobierno del alcalde de Madero, Adrián Oseguera, tiene por objeto reconstruir el tejido social causado por la violencia. La recuperación de los espacios públicos de la urbe petrolera que lleva a cabo revive la convivencia familiar, como ha ocurrido en la plaza La Pirámide de la Unidad Nacional, con la rehabilitación del área de juegos infantiles inaugurada ayer por el titular del ayuntamiento.
POR JOSÉ LUIS HERNÁNDEZ CHÁVEZ
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