Rompiendo costumbres misóginas que alentaban la competencia entre mujeres con el fin de mantenernos divididas, las mujeres encontramos en la colectividad una forma más de combatir el sistema patriarcal que nos oprime. “Mujeres juntas, ni difuntas” nos dijeron en casa, luego en la escuela y más tarde en la actividad laboral. Pero ya hoy sabemos que “juntas somos más fuertes”.
Algunas jóvenes quizás no lo saben, porqué nacieron en una era donde pueden votar, ser votadas, aspirar a cualquier carrera o trabajo, elegir casarse o no, o decidir ser madres o no, qué, en años muy recientes estos derechos eran inalcanzables, pero mujeres unidas por distintas causas fueron logrando, poco a poco, que se visibilizará esa desigualdad e hicieron algo, una lucha que cambiaría la historia.
Antes la consigna social era mantenernos en franca competencia, hasta hace poco escuchaba que alguien decía “el peor enemigo de una mujer es otra mujer” como advertencia del peligro de vernos juntas. Sin embargo, sí se puede, ya le hemos demostrado al mundo que sabemos ponernos de acuerdo, que nos juntamos para defendernos mejor en una era convulsa donde prevalece la desigualad social por género.
En este sentido es que la integración de la nueva organización de mujeres periodistas de ciudad Victoria, una agrupación sin fines de lucro, sin ambiciones económicas o políticas y solo con el fin de dignificar el periodismo con visión de género, vendrá a fortalecer el trabajo de los medios de comunicación, con estudios y nuevas narrativas que formen e informen a las nuevas sociedades con una opinión de respeto a los derechos humanos de las mujeres.
Las leyes actuales, que se establecen a partir de iniciativas feministas, nos dan el sustento para mejorar el ejercicio de comunicar, pero aún hay muchos reglamentos que no se conocen o no se aplican, a pesar de que cada vez más mujeres estamos metidas en las redacciones de los medios, aún hay resistencia para visualizarnos con los mismos derechos que los hombres.
Falta mucho trabajo por hacer en la capacitación de un periodismo que visualice bien las problemáticas que más duelen a las mujeres, que las retrate con ética y sin morbo, que fomente la igualdad y deje de publicitar el machismo, de hacer apología de los delitos como el feminicidio, la violación sexual o la trata; tenemos que seguir luchando para que la mujer no se objetó sexual en los diarios, ni en los medios electrónicos o digitales; así que es ardua la tarea y por ello las mujeres periodistas nos necesitamos juntas.
Y nos juntamos a partir de iniciativas que ya han probado que, en colectivo avanzamos más y mejor; Rossy Rodríguez y Dora de la Cruz son las pioneras en el periodismo con visión de género en Tamaulipas, de su labor altruista y bajo su capacitación hemos aprendido muchas, con su gestión nos hemos beneficiado de talleres y cursos internacionales que nos han preparado para ejercer nuestra labor periodística con responsabilidad frente a los retos informativos actuales que demandan visión de género.
Enhorabuena por una nueva red, Periodistas con Visión de Género de Cd. Victoria, una agrupación sorora, que nos junta para trabajar por una y por todas, con el cometido del feminismo que, además de ayudar a las mujeres, aboga por una sociedad armoniosa y plena.
Por Guadalupe Escobedo Conde
