A diferencia de la reforma electoral realizada por el gobierno del presidente Peña Nieto en el 2014 que eliminó al IFE y creó el INE, que se efectuó sin ninguna protesta del PAN ni de los empresarios, la propuesta por el presidente López Obrador se ha convertido en bandera de lucha de la oposición para recuperar el terreno político que perdió en las elecciones de 2018 y siguientes.
Formalmente, los organizadores de las movilizaciones de este domingo en 36 ciudades del país son agrupaciones de la sociedad civil como el Frente Cívico Nacional y la organización UNID@S que sustituyó a “Va por México” de los Claudio X. González, la realidad es que están detrás no solamente los grandes magnates sino también Acción Nacional y seguidores.
Las agrupaciones sociales independientes carecen de medios económicos para realizar una protesta de esas dimensiones. Cabe señalar asimismo que en la reforma de Peña las principales diferencias entre el IFE y el INE eran que, en tanto el primero solo tenía competencia en las elecciones federales, el segundo puede organizar todas las elecciones, locales y federales.
Los actuales consejeros y magistrados fueron designados por los partidos políticos a través de la Cámara de diputados, cuando aún no existía Morena. La de AMLO, en cambio, en la que el INE se llamaría Instituto Nacional de Elecciones y Consultas (INEC), propone cambios radicales al sistema electoral, entre los que destacan 1.- La elección de los consejeros y magistrados mediante el voto popular y la reducción de 11 a siete de los integrantes. 2.- Reducir el número de legisladores federales, de 500 a 300 en el de los diputados y de 128 a 96 en el de los senadores. También contempla, 3.- Eliminación del financiamiento público ordinario a
los partidos políticos, que este sea sólo para los gastos de las campañas en los periodos electorales, los restantes deberán cubrirse con las aportaciones de miembros y simpatizantes; 4.-Recorte de 18 minutos a los tiempos de la radio y la televisión; 5.- Desaparición de los organismos electorales locales, que son irrelevantes pues la última palabra siempre la tienen los federales. Y 6.- Revocación de mandato, solo que, en lugar del 40 por ciento del listado nominal que establece la actual legislación, sea el 33 por ciento para tener el carácter de vinculatorio.
Para que la reforma de la 4T proceda, sin embargo, requiere del voto de las dos terceras partes de los integrantes de las dos cámaras con el que Morena, el Verde y el PT no cuentan, por lo que requerirá el respaldo de otros partidos para conseguirlo.
¿Lo logrará? Habrá que ver. En asuntos de otra índole, el que sigue sin obtener el respaldo de las bases panistas es el dirigente estatal de los albiazules, Luis René Cantú.
En el acto de toma de protesta al nuevo dirigente del partido en Madero, Francisco Castañeda, que presidió, ni siquiera asistieron los jerarcas de los grupos de Javier Morado Salazar y Agustín De la Huerta, que apoyaron la candidatura del médico.
Para aquellos que piensan, por otra parte, que la impugnación de la imposición del Cachorro es asunto olvidado, les informamos que las demandas interpuestas por José Julián Sacramento Garza y Miguel Pérez Álvarez siguen su curso en espera de resolución. Antes de concluir, a decir del ex titular de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda, Santiago Nieto Castillo, el exgobernador Francisco García Cabeza de Vaca está imposibilitados para ser candidato a senador, como se especula, por la simple y sencilla razón de que es un prófugo de la justicia.