El «nearshoring» consiste en mudar las fábricas del país de origen a uno cercano en el que todo sea más barato, el salario de los obreros, la electricidad y los combustibles, los insumos y los impuestos. Eso permite pensar que México sea un destino viable para el nearshoring.
En Nuevo León, Coahuila y Tamaulipas se tienen fundadas esperanzas de multiplicar nuevas inversiones extranjeras, motivadas por la mencionada relocalización de empresas chinas y asiáticas para satisfacer proveeduría local y así atender el atractivo mercado norteamericano.
Esto, ante el rompimiento de las cadenas de abastecimiento y de los anteriores clústeres ubicados en esos países, que por la invasión de Rusia a Ucrania y la actual crisis económica global, se han complicado las cosas, principalmente en el sector de los «semiconductores».
Un problema que sufre actualmente el abastecimiento de semiconductores, es que actualmente Taiwán ofrece más del 35% de los mismos y China amenaza las operaciones del mercado por la pretensión de invadir Taiwán, considerando tener derechos históricos sobre la isla.
Esta circunstancia, está orillando a los inversionistas del sector automotriz y aeroespacial, a buscar ubicar sus empresas en el Noreste y el Bajío mexicano, bajo la tendencia del nearshoring o relocalización industrial.
Sin embargo, se tienen por ahora varios retos para vencer, entre ellos, la instalación de modernos y adecuados parques industriales, el abastecimiento de energía eléctrica limpia y barata, la capacitación del capital humano, el respeto al TMEC, así como proporcionar seguridad jurídica a los inversionistas extranjeros y disminuir la inseguridad por robos en transportes de ferrocarriles y carreteras.
En el caso de los estados del noreste, liderado por los proyectos de nearshoring de Nuevo León, seguido por los nuevos proyectos en proceso en Coahuila y Tamaulipas, es imprescindible partir del supuesto que el sector industrial se está desplazando hacia localidades que ofrecen mejores condiciones para operar y donde es necesaria una revisión a la capacitación del «capital humano» que debe adaptarse a los nuevos procesos de digitalización.
Para ello, se requieren hacer convenios entre las asociaciones de industriales y las universidades e institutos de educación superior y media superior, adecuando los futuros programas de estudios hacia las necesidades de las nuevas empresas que estarán relocalizándose en los siguientes cinco años.
Se requieren dar prioridad a la capacitación de mano de obra calificada para ingenieros y operadores industriales graduados en nuestras universidades locales.
Para ello, es menester que con los constantes cambios tecnológicos y la digitalización se requiere personal especializado a nivel técnico.
La justificación de estos programas de capacitación al capital humano, se debe a que las cifras de la Inversión Extranjera Directa (IED) mostraron un gran movimiento derivado de la llegada de flujos que buscan oportunidades por el nearshoring, al grado que, al cierre del 2022, la IED alcanzó un nivel histórico, con un crecimiento de 12% y un monto por más de 35,291 millones de dólares al cierre.
De esa manera, se observó un fuerte crecimiento anual de la IED relacionada con la manufactura y el sector servicios en Nuevo León con 45%, Jalisco con 64.5%, Estado de México con 43.5%, Tamaulipas con 78.3% y Querétaro con un crecimiento anual de 50.7 por ciento.
El impacto de nuevas inversiones extranjeras en la frontera ha sido exponencialmente multiplicado ante la ruptura de las cadenas de suministro, por ello se abandonó la práctica de offshoring (transferir sus procesos de negocio a terceros ubicados en destinos lejanos) por el nearshoring (traer parte de la producción cerca del cliente).
Por ello, los empresarios de la frontera noreste: Nuevo León, Coahuila y Tamaulipas se han beneficiado con la relocalización, ya que la producción de China y Europa busca disminuir costos para abastecer al principal mercado en Estados Unidos.
Pata los tres estados del noreste y en los del Bajío (SLP, Guanajuato y Querétaro), se estima que ahora existe la intención de más de 400 empresas en realizar proceso de relocalización de Asia a México, bajo la moda del nearshoring.
Por sectores, se estima que el 36% de la IED al cierre del 2022 corresponde al sector manufacturero.
Destacando la fabricación de automóviles y camiones, fabricación de componentes electrónicos, fabricación de autopartes, fabricación de equipo de generación y distribución de energía eléctrica e industria básica del hierro y del acero…
Por Dr. Jorge A. Lera Mejía