En reiteradas ocasiones analistas han planteado a los partidos integrantes de la oposición que, si están realmente decididos en pelear al tú por tú la presidencia a Morena el 2024, necesitan, además de jalar para el mismo lado, anteponer los intereses de la sociedad a los propios y ofrecer a los ciudadanos una alternativa convincente de gobierno.
Lamentablemente, parece que la recomendación les ha entrado por un oído y les ha salido por otro a los jerarcas nacionales del PAN, el PRI y lo que queda del PRD.
A unos meses del arranque formal de la carrera por la presidencia y la mayoría del congreso de la Unión estos están más interesados en la definición del reparto de las posiciones políticas. Y peor aún, enfrascados por ese motivo en pleitos internos que erosionan los aun débiles cimientos del proyecto aliancista.
Caso concreto el que protagonizan los grupos antagónicos del Revolucionario Institucional, el encabezado por el dirigente nacional Alejandro Moreno y el de su principal adversario Miguel Ángel Osorio Chong. En Acción Nacional las cosas andan igual.
Aunque las discrepancias no se han desbordado, como en el tricolor, el grupo de Marko Cortés Mendoza no parece dispuesto a ceder un centímetro que ponga en riesgo el control político que tiene de la agrupación.
Mientras los tiempos se achican, los partidarios de la alternancia en el gobierno federal andan a la deriva, situación que se refleja en algunas entidades federativas, como la de Tamaulipas, debido a la falta de dirigentes que abanderen su lucha, en el primero, como es del dominio público, el presidente Edgar Melhem renunció al cargo y en el segundo, René Cantú Galván sigue siendo un cero a la izquierda.
A pesar de que el golpeteo sistemático contra el gobierno obradorista y la 4T no ha sido redituable, las preferencias electorales a favor de Morena en los Estados en donde habrá elecciones así lo demuestran, siguen sin proponer opciones a los graves problemas nacionales.
Las consecuencias están a la vista. En nuestra entidad, como en el resto de la República, han perdido casi todo. No obstante que el gobierno de Cabeza de Vaca tenía todo para seguir gobernando a los tamaulipecos otro sexenio, los ciudadanos lo reprobaron.
Tres años después de que el PAN sacó al PRI del palacio el 2016, minimizaron el crecimiento de Morena y el 2021 pagaron el error, el partido de la cuarta transformación les quitó la mayoría legislativa y los ayuntamientos de mayor importancia y en el 2022, el partido guinda los sacó de la gubernatura. Hasta el último minuto del régimen cabecista siguió haciendo las cosas mal.
Ni siquiera se dio cuenta de que la principal víctima de esos desatinos había sido el propio PAN. El gobierno del alcalde Adrián Oseguera, por otra parte, declaró listo el plan de atención a los turistas de las vacaciones de la Semana Santa y el verano.
Con ese propósito ha capacitado a personal del municipio e integrado a 12 módulos de información para a orientar a los paseantes, a fin de que cuando estos acudan a los centros recreativos, como el de Miramar, puedan disfrutar mejor los días de descanso. En Tampico hace lo propio Chucho Nader.
En la reciente visita que hizo al puerto el embajador de Polonia, Maciej Tadeusz Zietara, el jefe edilicio porteño destacó la importancia de promover internacionalmente a la ciudad como medida para atraer inversiones e impulsar el desarrollo económico y la industria sin chimeneas.
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