Este domingo 4 de junio se llevará a cabo una Jornada Electoral en el Estado de México y en Coahuila, misma que será determinante tanto para el Partido Revolucionario Institucional (PRI) como para Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y es que se define a los gobernadores de ambos estados.
El Estado de México ha pertenecido por más de siete décadas a la institución tricolor, siendo uno de sus bastiones más importantes en cuanto a las demarcaciones que puede gobernar. Alejandra del Moral fue la candidata elegida para intentar hacerse con la gubernatura, por parte de la coalición Va por México, en el que se han integrado el PRI, el Partido Acción Nacional (PAN) y Partido de la Revolución Democratica (PRD).
Su contrincante será Delfina Gómez, de Juntos Haremos Historias, que se encuentra conformada por Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Partido del Trabajo (PT) y Partido Verde Ecologista de México (PEVM), quien buscará que su partido domine por primera ocasión en la entidad mexiquense.
En 2018, Morena llegó por primera ocasión a la presidencia de México, de la mano de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), logrando superar la hegemonía que habían tenido el PRI y PAN en el máximo cargo político del país.
Con la llegada del partido guinda a la presidencia, el instituto tricolor ha comenzado a ver una amenaza en las entidades que gobernó por décadas, uno de los principales es el Edomex, en donde se han mantenido por más de 70 años.
El riesgo es latente para el PRI, quien se encuentra falto de líderes al interior de sus filas, con sus voces autorizadas alejadas de la toma de decisiones, entre ellos Arturo Montiel, Emilio Chuayffet, Humberto Benítez o Jaime Vázquez, quienes fueron pilares en el reconocimiento del partido en la entidad mexiquense.
Además, los recientes conflictos en los que se han visto involucrados sus militantes han afectado la imagen del instituto tricolor, además, varios especialistas habían previsto una derrota en la elección del Edoméx si se mantenían con su postura de hacer una alianza.
En cuanto a Coahuila se disputan la gobernatura de la entidad Manolo Jiménez Salinas, candidato de la coalición Partido Revolución Institucional (PRI), Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD); Ricardo Mejía Berdeja, del Partido del Trabajo (PT), Armando Guadiana Tijerina abanderado de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y Evaristo Lenin Pérez del Partido Verde (PVEM).
De igual manera, el estado norteño es uno de los pilares que siguen sosteniendo al PRI, por lo que la contienda es clave para que presenciar su estadía o salida si Morena, el PT o el Partido Verde logran arrancársela de las manos.
El proceso electoral se mantiene en vilo ya que Cohuila perteneció al partido tricolor por casi 100 años de su historia. Desde 1929 dicho partido se ha mantenido aferrado con uñas y dientes al estado. No obstante este 2023 se ve incierto para el PRI ya que entre los candidatos los votos se mantienen cerrados a diferencia de años anteriores.
Para añadir más tensión a la contienda, este año existen un total de cuatro candidatos pero una ruptura en las alianzas. Morena y PT se enfrentan por todo o nada, ya que en diciembre de 2022 el partido guinda seleccionó como candidato a Armando Guadiana, una decisión que rechazó Ricardo Mejía Berdeja.
Lo que lo impulsó a dejar su cargo como subsecretario de Seguridad y Protección Ciudadana para lanzarse por la gobernatura de Coahuila resguardado por el Partido del Trabajo.
A pesar de que la dirigencia nacional del Partido del Trabajo (PT) anunciara el 30 de mayo que se sumarán a la alianza de Morena y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), su candidato Ricardo Mejía Berdeja se mantuvo renuente y rechazó todo tipo alianza. “El Tigre sigue firme. Vamos a ir a las elección el 4 de junio”, señaló.
CON INFORMACIÓN DE INFOBAE