Un incremento de 3 pesos en el garrafón de agua se registró en el municipio de Altamira, de 18 pesos pasó 21.
El intenso calor que se ha registrado en la zona conurbada, «disparó» el consumo de agua, por lo que en plena canícula costará más.
«Lo que sí nos aumentaron fue el agua de botellón, nos la incrementaron tres pesos, estaba en 18 y ahora está en 21 pesos», comentó el restaurantero Sandro Bribiesca.
En algunas purificadoras de la región, el nuevo precio del agua en garrafón se aplicó desde que inició la semana.
Mencionó que hasta el momento no tiene planeado hacer ajustes en los precios de los platillos, pero no los descarta en el regreso a las actividades escolares.
«En nuestro caso no podemos subir por partes, normalmente aguantamos a que la utilidad merme un poquito hasta realizar un ajuste general».
Refirió que, con las altas temperaturas, la gente llega a pedir agua en vez de las bebidas calientes, por lo que se incrementó el gasto en dicho rubro.
Comerciantes comentaron que, al aumentar el precio del agua embotellada, productos como el hielo también aumentará y del cual hubo un desabasto hace dos semanas a causa de las altas temperaturas.
Desde el 2021 que no se registraba un incremento considerable en el precio del botellón de agua, aunque las marcas nacionales manejan precios más altos en comparación al que se ofrece en negocios locales o en los llamados faros.
Óscar Figueroa/La Razón
