CD. VICTORIA, TAM.- Pese a tener problemas graves en sus rodillas desde hace seis meses y tener un diagnóstico de urgente atención por un traumatólogo particular, Merary Gámez Nieto no ha obtenido un oficio de referencia a Monterrey, porque su atención está programada para el 19 de julio.
En entrevista con EXPRESO, la quejosa señala que en el ISSSTE le hicieron diversos estudios sin encontrarle el problema a sus rodillas, “primero me hicieron rayos X, luego un eco, lo más reciente fue una resonancia”.
Hace días pese a que fue internada de urgencia –la semana pasada- por el dolor que el problema le causa y que el traumatólogo con el que tiene cita estaba de rondín, éste le dijo que no podía ver el resultado de la resonancia porque tenía muchos pacientes que atender y que se esperara hasta el día de la cita.
“Me acaban de hacer una resonancia y necesito una cirugía urgente ya estuve este miércoles internada y el traumatólogo, Arnoldo Adrián García Ruiz, que me atiende y me va operar pasó a urgencias y le comenté que si me podía revisar la resonancia y me dijo que no porque tenía muchos pacientes, que me atendería hasta la cita que voy a tener el 19”:
“Yo ya no aguanto son unos dolores muy fuertes porque está dañado el menisco y ligamentos, ya me rosa hueso con hueso”, dijo luego de explicar que fue a ver a un doctor particular para que revisara la resonancia y éste fue quien le advirtió que era necesario una cirugía urgente.
“El doctor, José Guadalupe Nava Reyna, sugiere la cirugía para lavar todas las secuelas del menisco”; por ese motivo fue a ver al director de la clínica a pedir su traslado a Monterrey.
El doctor Carlos Mendoza Banda, director del hospital, dijo que sí era necesario ser referida, pero como no dio la instrucción al traumatólogo que la atiende, “no me hicieron los documentos que se necesitan para ir a Monterrey”.
Es en ese sentido, por la tardanza y forma inhumana en que la han tratado que denuncia a los médicos del ISSSTE, porque su problema sigue avanzando sin que le hayan podido atender en tiempo.
POR NORA ALICIA HERNÁNDEZ HERRERA
