CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Por los hechos de violencia cometidos en San Fernando entre el 2010 y el 2011, fueron detenidos al menos 17 policías municipales, a quienes se les acusó de colaborar con el crimen organizado.
Según la indagatoria de la entonces PGR, los elementos preventivos entregaban a los detenidos a los bandas delictivas, en lugar de llevarlos a prisión.
Así, colaboraron con el secuestro de cientos de personas, que tuvo su trágica conclusión en el hallazgo de 196 cuerpos en las fosas clandestinas de San Fernando.
Por estos hechos, también fue investigado quien era alcalde en aquél tiempo: Tomás Gloria Requena.
En la declaración que rindió Edgar “H”, uno de los criminales detenidos por las masacres, narró cómo utilizaban vehículos del municipio para trasladar a la gente que bajaban de los camiones.
“Se les formaba a un lado del autobús, se les ataba las manos con candados que son unas tiras de plástico con sierra, luego se les subía a los vehículos mencionados y se les llevaba al monte”.
Si les parecían sospechosos de trabajar para el cartel rival los mataban. Según su narración, mataron hasta 30 pasajeros por viaje. “Una vez muertos, se hacía un hoyo con una maquinaria de trascabo y enseguida se les enterraba, por lo cual se les echaba cal para que no oliera, luego la tierra encima, el trascabo lo manejaba un ayudante de ‘La Sombra’, el trascabo se obtuvo en préstamo por parte de Tomás, el presidente municipal de San Fernando, este presidente prestaba el trascabo del ayuntamiento”.
Esta declaración obra en la averiguación previa PGR/SIEDO/UEIS/411/2011.
Por Staff
Expreso – La Razón