El berrinche que hizo Marcelo Ebrard tras comprobar que las encuestas no le favorecían y que la ganadora de la contienda interna de Morena había sido Claudia Scheinbaum, exhibió al ex secretario de relaciones exteriores como ingenuo.
¿Realmente no sabía Ebrard que la jefa de gobierno de la ciudad de México sería la candidata de Morena a la presidencia de la República? Claro que sí, lo sabía todo México.
¿Por qué entonces entró a la competencia? ¿Acaso para hacerse la víctima, asegurar una posición en el próximo gobierno o solo para demeritar el proceso de la Cuarta Transformación?
Algo similar sucedió en las filas de la oposición. Todos los que participaron en la contienda sabían que Xóchitl Gálvez sería la elegida.
Por eso los senadores Jorge Luis Preciado, Germán Martínez Cazares y Lily Téllez, abandonaron la contienda o se abstuvieron de entrarle, unos porque comprobaron que estaba arreglada, otros porque no les pareció el método.
Es evidente que tanto Claudia como Xóchitl fueron electas mediante un dedazo disfrazado, solo que en el Frente Amplio por México trataron de aparentar que sería diferente.
Pretendían hacer creer que serían los ciudadanos los que ungirían a la contendiente presidencial, pero se arrepintieron.
Ante el temor de que las bases priistas salieran en masa a respaldar a Beatriz Paredes y echaran abajo los planes de las cúpulas, cancelaron la consulta y optaron por la imposición.
EL INFORME DE OSEGUERA
Como estaba programado, por otra parte, el alcalde Adrián Oseguera, informó el viernes con cifras el avance que el municipio de Madero ha logrado a lo largo de su administración, avance que se obtuvo, como señaló, gracias a la continuidad que le otorgaron los votantes para que, mediante el sufragio, estuviera en el cargo no tres sino seis años.
Eso permitió al gobierno que encabeza, expresó, cumplir con los pendientes de obra pública, pavimentación, infraestructura educativa, deportiva y social, y reducir el rezago urbano que padece la urbe petrolera desde hace décadas, como la playa de Miramar que hoy, gracias al actual ayuntamiento, es un centro turístico reconocido internacionalmente.
Esa labor de crecimiento llegará al punto más alto el año entrante cuando se conmemorará el primer centenario de la fundación de la ciudad que aprovechará Oseguera para culminar la obra de desarrollo que inició hace cinco años.
Para cerrar, como lo anunciara semanas atrás, el diputado Erasmo González confirmó ayer que el presupuesto de egresos federal de 2024 contempla cosas buenas para Tamaulipas.
Una probadita que adelantó el legislador, es la inversión del mil millones de pesos que contempla el proyecto del PEF para la construcción del Metrobús de Tampico, Madero y Altamira y la modernización del transporte público de la zona metropolitana, una mega obra sin precedente.
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