Contrario a lo que ha pasado en otros procesos electorales, ahora la alianza opositora se adelantó a Morena en la presentación de sus candidatos.
El PAN y el PRI tienen claro que les toca remontar una desventaja considerable en la mayoría de los municipios del estado. Salvo Tampico donde las preferencias están de su lado, en el resto de las ciudades tienen frente a sí un camino muy sinuoso, sobre todo en aquellos municipios donde los alcaldes van por la reelección.
En Nuevo Laredo, Acción Nacional se la va a jugar con Yahleel Abdala, quien en el 2021 se quedó muy cerca de vencer a Carmen Lilia Canturosas. Pero ahora las circunstancias son muy distintas.
En aquél momento, la ex Secretaria de Bienestar llegó a las urnas con todo el poder del Estado, ahora enfrenta a una alcaldesa que encabeza al grupo político que se ha consolidado como el más influyente en la región.
Si además se confirma que en la boleta aparecerá el ex alcalde Carlos Canturosas como candidato a diputado federal por el Distrito 01, la situación se tornará todavía más compleja para Yahleel.
Una misión todavía más difícil enfrentará Luis René Cantú. “El Cachorro” va solo como precandidato del PAN a la alcaldía de Reynosa un poco por designio de los Cabeza de Vaca, pero sobre todo porque nadie más quiso entrarle a esa batalla perdida.
No es que Maki Ortiz y su hijo Carlos Peña Ortiz puedan presumir de un gran desempeño al frente del municipio, pero es cierto que -por las razones que sean- mantienen un férreo control político del territorio.
Como no hay alcaldías plurinominales, lo más probable es que Luis René Cantú se quede ahora sí, sin ningún puesto público.
En Matamoros, hay una ligera diferencia: ahí, la abanderada de la oposición será Lety Salazar, quien ya fue alcaldesa de ese municipio y conserva un capital político importante.
Pero además, en el bando morenista hay elementos suficientes para que se genere una tormenta perfecta. La disputa entre el alcalde Mario López Hernández -de tristes resultados en sus dos periodos de gobierno- y el diputado local, Alberto Granados -también con un desempeño lamentable en su paso por el Congreso- auguran una campaña difícil para la 4T en el municipio que más votos le ha dado a Morena en las últimas elecciones.
Al caso de Matamoros se agregaría el de Tampico donde, salvo que algo muy extraño pase, el PAN mantendrá la Presidencia Municipal. Pero en Altamira y Madero, priístas y panistas tienen muy poco que hacer.
Además, a diferencia de la última elección, muchos de los municipios rurales podrían pasar a manos de Morena.