ALTAMIRA, TAM.- Feligreses de la Parroquia de la Sagrada Familia de Nazaret, del Ejido El Repecho en Altamira, también hacen oración en la laguna de Champayán para que llueva.
Acompañadas por el párroco, los creyentes tienen confianza en que pronto habrá lluvias para que se termine la sequía de ocho años que padece el sur de Tamaulipas.
El 95 por ciento de la laguna de Champayán está sin agua y solamente se abastece a la población de la reserva que hay en los canales de navegación que fueron desazolvados desde hace más de año y medio, de lo contrario la crisis sería mucho peor.
Desde hace varias semanas, los feligreses católicos han hecho rosarios y hasta celebraciones eucarísticas para pedirle a Dios que envíe la lluvia.
En la zona rural de Altamira, los ejidatarios han recorrido las parcelas con la imagen de San Isidro Labrador, quien es considerado como el patrono de los agricultores.
Otras religiones cristianas han propuesto llevar a cabo una oración entre todas las iglesias, al considerar que debe existir la unidad ante un problema común que es la falta de agua.
Por Óscar Figueroa
La Razón