Con la crisis hídrica que se vive en el sur del estado de Tamaulipas, los riesgos principales en materia de salud, inflación, empleo y los efectos indirectos que conllevan cada una de estas problemáticas, preocupan a la sociedad y al sector empresarial.
La falta de agua ha provocado un impacto importante en el bolsillo de los ciudadanos en el sur del estado; al tratar de obtener agua potable para realizar sus tareas diarias han invertido en bienes de almacenamiento como lo son botes, tambos, Rotoplas, entre otros productos de almacenamiento, además, de los gastos que la mayoría de la población ha incurrido para adaptarlos a las tuberías de los hogares.
Por otro lado, la falta de agua está afectando fuertemente a los pescadores y productores agrícolas de la región, lo que tendrá un importante impacto en el nivel de precios de los productos pesqueros y alimenticios. Sin embargo, no hay que dejar de lado el hecho de que la sequía es una problemática nacional, lo que impactará aún más el nivel de precios de los bienes y servicios.
La falta de agua también está impactando la actividad económica industrial, de hecho, ya hay paros técnicos que ponen en riesgo los empleos de este sector, y no solo eso, también están en riesgo los negocios que directa e indirectamente están vinculados con la industria. La actividad de la industria petroquímica es de las más relevantes en el país, ha constituido el motor de crecimiento de la economía regional, siendo clave en el crecimiento y desarrollo económico de la zona.
De abril a mayo del presente año, en el municipio de Tampico se perdieron 1,238 empleos formales, mientras que en el municipio de Altamira el total de empleos formales que se perdieron fue de 1,210 trabajadores, en Ciudad Madero el total de empleos formales cayó en 218 trabajadores, en los tres municipios se perdieron en el último mes 2,666 empleos formales. Por el contrario, se crearon 1,625 puestos de trabajos formales, lo que significa que en términos reales en la región sur del estado entre abril y mayo se redujo el total de trabajadores en 1,041 trabajadores.
En el caso de Altamira, las actividades económicas que despidieron trabajadores en orden jerárquico fueron: agricultura; instalación vinculados al acabado o remodelación de obras de construcción; fabricación de concreto premezclado; y, servicios directamente vinculados con el transporte por agua y/o servicios de supervisión y mantenimiento en plataformas marinas. En el municipio de Tampico: construcciones de obras de infraestructura y edificaciones en obra pública; supermercados, tiendas de autoservicio y de departamentos especializados por línea de mercancías; pesca de altura y costera; instalaciones sanitarias, eléctricas, de gas y de aire acondicionado; y servicios de alquiler de maquinaria y equipo para la construcción con operadores.
Además de los efectos negativos que ha tenido la crisis hídrica en la región, se suma la aparente contracción del sector construcción en la zona, lo cual podría agravar los efectos económicos. Por tal motivo, es importante dar seguimiento y atender la problemática del agua en la zona, debido a que los efectos económicos podrían ser mayores y afectar no solo al sector empresarial, sino la calidad de vida de los ciudadanos en el sur del estado. Usted ¿qué piensa?
Por. Jorge Alberto Pérez Cruz