El caso legal de Pablo Lyle ha tomado un nuevo giro. El pasado 10 de junio se realizó una audiencia virtual en relación a su proceso legal. Lyle, quien cumple una condena de cinco años de prisión desde el 3 de febrero de 2023 por el homicidio involuntario de Juan Ricardo Hernández, esperaba una reducción de su sentencia. Sin embargo, la audiencia trajo noticias desfavorables.
Durante la audiencia, se dio a conocer que la defensa de Pablo Lyle renunció al caso debido a “diferencias irreconciliables”. Esta información fue confirmada por el programa de televisión “Hoy” donde se detalló que Lyle no estuvo presente en la audiencia.
Ante esta situación, el juez solicitó programar una nueva fecha para continuar con el proceso. Si Pablo Lyle no logra conseguir un nuevo equipo legal para esa fecha, se le asignará un abogado de oficio para que lo represente.
Nueva demanda contra Pablo Lyle
La familia de Juan Ricardo Hernández, la víctima de 63 años, ha presentado una demanda civil en la corte de Miami. La demanda solicita una indemnización por los gastos funerarios, atención psicológica y la pérdida de ingresos de Mercedes Arce, pareja de Hernández.
El abogado de la familia, André Crenshaw, explicó en el programa “Ventaneando” que aunque el caso criminal de Lyle se suspendió momentáneamente, continúa vigente y aún no ha concluido.
Pablo Lyle tiene la posibilidad de salir de prisión en septiembre de 2027. La situación del actor se ha complicado significativamente, y su futuro depende ahora de la capacidad de su nueva defensa para lograr un acuerdo más favorable.
El caso legal de Pablo Lyle
El caso de Pablo Lyle ha sido complejo desde el principio. El incidente que llevó a su condena ocurrió en marzo de 2019, cuando durante una disputa de tráfico en Miami, Lyle golpeó a Juan Ricardo Hernández, quien posteriormente falleció debido a las heridas sufridas.
La defensa de Pablo Lyle ha argumentado que actuó en defensa propia, pero los tribunales determinaron que fue culpable de homicidio involuntario.
Pese a que Lyle ha pasado casi cuatro años en arresto domiciliario antes de ser condenado, solo se le contaron cinco meses en prisión como parte de su sentencia. Esta situación ha generado controversia y complica aún más su situación legal. Además de enfrentar la condena, Lyle ahora enfrenta una nueva demanda civil por parte de la familia de la víctima.
CON INFORMACIÓN DE EXCÉLSIOR