La transición al IMSS Bienestar se está convirtiendo en un parto doloroso. Existen afectados en todos los niveles y no hay distinción.
Entre los afectados aparecen: derechohabientes, familiares, administrativos, enfermeras, médicos generales y especialistas a quienes alcanza esta complicación.
No se puede ignorar que llegar a las direcciones de los hospitales, también ha sido un proceso complicado con fórceps para mantener vivo un proceso y lograr un crecimiento adecuado.
Pero mientras, este proceso no es fácil para quienes tienen el reto de sacar esta transición.
Los trabajadores en hospitales están haciendo todo lo posible para atender a pacientes y, en muchas ocasiones, las familias apoyan a los médicos para garantizar que no le falte nada al paciente.
No es solo responsabilidad de médicos o de directivos de los hospitales; si dependiera de ellos, darían todo por que mejoren las condiciones. En su esencia, los médicos y especialistas son personas buenas y humanas.
Aunque existen excepciones, son minoría. Incluso hay trabajadores sociales y secretarias que hacen lo que está en sus manos por ayudar.
Muchas de las situaciones en hospitales de Tamaulipas, deben atribuirse al gobierno federal. En salud, han dejado al sistema enfermo.
Hoy en día, existe una generación de personal administrativo, directivos y médicos que están liderando esta transición con una paciencia y tolerancia encomiables.
Es importante reconocer su habilidad para escuchar y resolver las complicaciones que se presentan diariamente, dentro de sus capacidades.
Los más afectados por decisiones arbitrarias de los gobiernos son; directores y trabajadores de menor rango.
Al visitar el Hospital General de Ciudad Victoria por uno o dos días y sentarse en las áreas de consulta o en la misma dirección, se puede confirmar de primera mano lo que realmente sucede, según lo compartido por los pacientes.
Incluso el personal médico, está preocupado por brindar la mejor atención posible, aunque a veces enfrentan críticas injustas que no merecen, al igual que administrativos, trabajadores sociales y enfermeras.
No solo es sorprendente su profesionalismo, sino también la paciencia que demuestran día a día.
El Hospital General es dirigido por el doctor Guillermo Eduardo Castañeda Gutiérrez, un especialista reconocido en Tamaulipas y respetado en todo el país, y es quien enfrenta uno de los mayores desafíos en esta dolorosa transición.
Sin duda, el gobernador Américo Villarreal y el Secretario de Salud Vicente Joel Hernández Navarro, confiaron en él debido a su firmeza y experiencia, tan necesarias en este momento de cambio.
Castañeda, cuenta con el doctor Jorge Alejandro Cortina Beltrán como Subdirector Médico y la doctora Adriana Gabriela Mejía Barcenas como Subdirectora Administrativa, respaldados por un equipo de profesionales en todos los niveles y especialidades, comprometidos con el servicio a los derechohabientes.
Ahora es responsabilidad de funcionarios de primer nivel apoyar a directores de hospitales y clínicas en Tamaulipas, así como a todo el personal que opera en ellos.
En la Secretaría de Salud de Tamaulipas, figuran médicos con habilidades políticas como Gabriel de la Garza, conocido por su capacidad para obtener recursos y luchar por ellos con creatividad, como lo ha demostrado en otros gobiernos.
En el Hospital Civil, el doctor Arturo Vázquez García también aporta su experiencia como especialista en servicio público. Vicente Plascencia Valadez, director del Hospital Infantil, y el subsecretario de Atención Médica, Martínez Arturo Rodríguez Alcocer, son igualmente reconocidos por su impecable trayectoria.
Otras áreas igualmente prioritarias para el gobierno de Américo Villarreal son laqss unidades médicas especializadas como la UNEME DEDICAM Victoria, encabezada por el doctor Jorge Luis Quintero Salinas, un equipo que aporta creatividad para solucionar necesidades y problemas.
En su rol actual como responsable del IMSS-Bienestar, Marggid Antonio Rodríguez Avendaño, debe implementar soluciones en el sistema de salud y evitar problemas adicionales para el gobernador Américo Villarreal.
Muchas de las responsabilidades para que los hospitales funcionen al máximo recaen en Rodríguez Avendaño.
Si está en el cargo por razones políticas y no puede cumplir, sería más efectivo que reconozca sus limitaciones y lo discuta directamente con el gobernador, considerando una reubicación.
Es importante recordar que este gobierno recibió un sistema de salud gravemente “enfermo”, resultado de la confrontación constante del ex gobernador Cabeza de Vaca con López Obrador , así como de prácticas de corrupción que causaron daños a farmacias, obras hospitalarias y fondos de seguros de vida para el personal médico.
La cuenta regresiva de los 72 meses de este gobierno está en marcha y los principales operadores del sistema de salud no pueden dejar solos a los directores y al personal de hospitales, especialmente si tienen vínculos cercanos con el gobernador, ya que deben responder con resultados a todos los tamaulipecos.
Dos años y nada
Este 29 de junio, se cumplieron dos años del homicidio en contra de Antonio de la Cruz y su hija Cinthya sin que se conozca aún, por qué le quitaron la vida de esa manera tan brutal.
¿Quién invirtió tanto en la operación y contrató a un profesional para asesinar al periodista de Expreso esa mañana de miércoles del 29 de junio del 2022?
Hay un detenido, autor material de los hechos e integrante de un grupo delictivo, pero se desconoce los motivos por los cuales asesinó a Toño de la Cruz y a su hija. Tampoco se sabe quién mandó asesinarlo.
La Fiscalía debe abundar sin titubeos en este momento, para esclarecer la muerte de Toño y hacer justicia, porque hasta hoy, ni su familia, amigos y compañeros, han podido tenerla.
Por Arturo Rosas H.