CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Con el objetivo de abordar los problemas causados por el arrastre de materiales desde el Cañón del Novillo hasta los manantiales La Peñita, la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado instalaran unas cribas que impidan el que el material pase a estos.
Eliseo García Leal, Gerente General de la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Victoria (COMAPA Victoria), junto a personal técnico y electromecánico especializado, visitó las instalaciones de los manantiales.
“Durante esta visita, se discutieron propuestas y proyectos para mejorar el servicio a las colonias Tamatan y Luis Echeverría” zonas que son mayormente afectadas debido al arrastre de materiales como serpentina.
Eliseo García Leal anunció que se instalarán tres cribas para detener el paso de serpentina, arena, basura y naturaleza muerta hacia los manantiales. Esta medida se complementará con proyectos de infraestructura para garantizar una solución definitiva y permanente, asegurando el suministro de agua a las colonias afectadas.
En respuesta a los daños ambientales causados por la actividad minera en el Cañón del Novillo, COMAPA ha decidido emprender acciones legales contra la empresa responsable. La minera ha sido acusada de afectar seriamente los manantiales de La Peñita, una fuente crucial de agua para Ciudad Victoria.
García Leal afirmó que, aunque el agua no está contaminada, la actividad minera está afectando su aspecto debido al material tirado al paso de los camiones. Estos residuos también dañan gravemente los caminos y accesos a las fuentes de agua.
“Queremos que mitiguen los daños, que limpien todo lo que están tirando en el río. Sus excavaciones no solo afectan a COMAPA, sino a toda la ciudad, impactando negativamente el medio ambiente”, declaró García Leal.
Afirmaron que la Procuraduría del Medio Ambiente ha estado recopilando evidencia y supervisando la situación, y ha levantado una demanda contra la minera. COMAPA está proporcionando material de evidencia y antecedentes, ya que la minera había sido retirada en los años 90, pero volvió a operar con un nuevo permiso.
Las recientes lluvias han exacerbado el problema, causando que la serpentina explotada en la mina se arrastre y filtre en el suelo del río, llegando hasta los manantiales y afectando las bombas y cárcamos de COMAPA.
La actividad minera ha destruido los caminos de acceso a los manantiales en el Cañón del Novillo, dificultando las operaciones de mantenimiento y protección de La Peñita. Este problema, que ya había ocurrido en los años 90, se ha repetido debido a la reactivación de la minera con un nuevo permiso nacional.
García Leal pidió que, si la empresa no va a cesar sus actividades, al menos mitigue los daños y compense los perjuicios causados.
Por Raúl López García
Expreso-La Razón