La dictadura se refiere a un sistema de gobierno en el cual una sola persona o un grupo mantiene el poder absoluto, sin limitaciones constitucionales ni legales, y generalmente se perpetúa en el poder a través de la fuerza, el fraude electoral o la manipulación de las instituciones democráticas. En este contexto, Venezuela ha sido un ejemplo contemporáneo de cómo se puede transformar una democracia en una dictadura.
El régimen de Hugo Chávez llegó al poder en Venezuela en 1999 tras ganar las elecciones presidenciales con una plataforma populista y socialista. Durante su mandato, Chávez implementó una serie de reformas constitucionales y políticas que centralizaron el poder en el Ejecutivo y debilitaron las instituciones democráticas. Su gobierno fue marcado por un fuerte control sobre los medios de comunicación, la judicialización de la política y la militarización del país.
Tras la muerte de Chávez en 2013, Nicolás Maduro, su vicepresidente y sucesor designado, asumió la presidencia. Desde entonces, Maduro ha continuado y profundizado las políticas de Chávez, manteniéndose en el poder a través de elecciones ampliamente consideradas fraudulentas. Con su reciente victoria en 2024, Maduro extiende su mandato hasta 2030, sumando así un total de 17 años en el poder, si cumple este nuevo período.
La reelección de Maduro ha generado un rechazo a nivel internacional. Diversos países y organizaciones han denunciado irregularidades en el proceso electoral, incluyendo la manipulación del padrón electoral, la intimidación de votantes y la falta de transparencia. La reacción de la comunidad internacional ha incluido la expulsión de embajadores venezolanos y la declaración de numerosos ex mandatarios y observadores electorales como personas no gratas en Venezuela. Esta acción subraya el aislamiento diplomático en el que se encuentra el país bajo el régimen de Maduro.
En México, el candidato de la oposición venezolana, Edmundo González, ganó con el 97.02 por ciento de los votos emitidos, mientras que Maduro solo obtuvo el 2.17 por ciento. Este resultado refleja el rechazo de la comunidad venezolana que radica en México hacia el régimen de Maduro. De los 3,125 venezolanos registrados para votar en México, solo se presentaron 1,477, el 47.26 por ciento del padrón.
La reciente elección en Venezuela, que ha permitido a Nicolás Maduro perpetuarse en el poder, refuerza la percepción de que el país vive bajo una dictadura disfrazada de democracia. Las reacciones internacionales, las sanciones y el rechazo de los exiliados venezolanos destacan la urgencia de una solución democrática que permita la restauración de las libertades fundamentales y el respeto a los derechos humanos en Venezuela.
La historia juzgará a Nicolás Maduro por la forma en que ha manipulado el sistema para mantenerse en el poder. Lo que empieza mal, inevitablemente termina mal. Como dijo John F. Kennedy, “La tiranía y la opresión son los caminos más seguros hacia la ruina de una nación.” Un “liderazgo” que no escucha a su pueblo, tarde o temprano será abandonado por él.
Eric Valdez Gómez
Consultor en Comunicación Política (Compol)
Experiencia en Campañas Políticas en México y Extranjero
Enfoque en Comunicación, Medios y Marketing Digital
Twitter: @ericvaldeztv